La licitación de espectro para 5G podría llevarse a cabo entre marzo y abril

El gobierno nacional busca dar pasos decisivos para la llegada de la red 5G en Argentina. Tras el avance del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) en la aprobación de las bandas de frecuencias para el despliegue de sistemas de quinta generación, desde el organismo proyectan que la licitación del espectro se realizará entre marzo y abril.

Para tal fin, el ente liderado por Claudio Ambrosini ligó la banda de frecuencias comprendida entre 3300 y 3600 MHz al servicio móvil terrestre. «Realmente fue un acuerdo necesario para poder avanzar», destacan de la última reunión del organismo, realizada en diciembre pasado. En este mismo sentido, también se aprobó el Reglamento General del Servicio de Telecomunicaciones Fiables e Inteligentes, que regulará la utilización de esta tecnología.

En primera instancia, estiman al interior del Ministerio de Economía que la asignación del espectro demandará entre U$S 1000 y U$S 1400 millones. Luego, la inversión que realizará cada empresa, Personal, Claro y Movistar, «podría estimarse entre U$S 4 mil y U$S 7 mil millones de dólares a lo largo del tiempo», calculan en el gobierno.

La Embajada advierte

En Argentina, la facultad del Enacom se limita a generar el marco regulatorio y de seguridad para el despliegue de las telecomunicaciones y es neutra en relación a los provedores. Justamente, de esa selección se encargan los operadores de telecomunicaciones: las empresas privadas. La reglamentación en este aspecto es clave para entender la participación de Huawei en el país, cuestionada por la embajada estadounidense en Buenos Aires.

La advertencia responde al contexto global: durante el año pasado, se mantuvieron vigentes las sanciones (ampliadas) que Donald Trump le aplicó al gigante asiático en 2019, recrudeciendo así la guerra comercial que Estados Unidos mantiene con China. De todos modos, en su carta de fin de año, el presidente de Huawei, Eric Xu, destacó que los ingresos de la empresa durante 2022 se mantuvieron estables porque «las restricciones norteamericanas ya no surten efecto» y entiende que el veto forma parte de la «nueva normalidad».

La tensión existente llevó a este medio a consultar qué posición toma el país: «Argentina se declaró neutral tecnológicamente, eso quiere decir que cada empresa de telefonía puede usar la tecnología que mejor se ajuste a sus necesidades sin intromisión ni sugerencia del Estado nacional», respondieron puertas adentro de la gestión.

Política de Estado

Al margen de la tirantez entre ambas potencias, lo cierto es que el despliegue del 5G avanza como política de Estado en el país por su promesa de revolucionar las telecomunicaciones.

La clave es su latencia, es decir, el tiempo entre que el usuario manda la orden en un dispositivo y se realiza.

Además, en términos de conectividad y comunicación, el 5G podría superar a la tecnología de WiFi porque requiere una infraestructura más chica, lo cual derivaría en antenas más chicas, más económicas y desparramadas a nivel nacional.

El abanico de funciones de la nueva red es amplio y sofisticado: garantiza desde la transmisión de videos de ultra definición para seguridad y misiones críticas, hasta el manejo autónomo de vehículos, la híper especialización en la cirugía y el control y automatización industrial, por ejemplo.

«La importancia viene por todos los beneficios que trae consigo la tecnología 5G. Esta viene principalmente a cubrir la necesidad de conectividad entre millones de dispositivos, es decir, para que el tan esperado ‘internet de las cosas’ pueda desarrollarse», explica César López, Telecom Sales Manager de Vertiv, en diálogo con Tiempo.

Para el profesional, la alta velocidad, mayor volumen de datos soportables y menor latencia «conllevan a obtener más ventajas para el desarrollo de la automatización en la industria, la educación, la telemedicina, la robótica, las Smart Cities, la semaforización, vehículos autónomos, y otros beneficios».

«Argentina no queda relegada en la adopción de esta tecnología a nivel mundial y su uso será transversal en todos los sectores de la empresa y del Estado», sentencia López.

A su vez, el profesional de Vertiv –firma especializada en tecnologías de infraestructura crítica– destaca el despliegue del 5G por encima de los vaivenes económicos argentinos: «Es de esperar que, a pesar del contexto económico nacional, las empresas operadoras de telecomunicaciones y centros de datos, sigan invirtiendo con mayor énfasis en la implementación de la red 5G, para satisfacer la demanda de datos que va en aumento».

Por otro lado, Pablo Pereira, CEO de NTT Data Argentina, asegura que la implementación de la nueva red «es el paso al que están procediendo casi todos los países del mundo» por eso «es necesario para estar en un pie de competencia tecnológico razonable». Sin embargo, el avance «dependerá de las condiciones de las licitaciones, que aún están pendientes» para el otorgamiento de los anchos de banda. Para el especialista en telcos, el siguiente paso determinará la viabilidad, amplitud y velocidad de despliegue. «Sería importante pensar en esto como un catalizador de nuevas economías y no tanto como el hecho puntual de la licitación de las bandas», concluye.

En la región

A nivel regional, el desarrollo de las redes 5G se encuentra más avanzado. En Chile, el despliegue de la red es mayor y el servicio ya se ofrece comercialmente al punto que ya hay dos millones de usuarios de telefonía 5G y se avanza con casos de uso de esta tecnología en la llamada Indsutria 4.0, que gira en torno de la automatización y robotización.

En Brasil, la licitación de noviembre de 2021 obtuvo una recaudación de más de mil millones de dólares, pero el grueso de los compromisos de las firmas privadas que participaron de la compulsa fue hacia las inversiones a realizar para desplegar las redes, lo que se hizo a lo largo de 2022.

Tando en Chile como en Brasil aparece Huawei como uno de los proveedores protagonistas. «