La jugada más arriesgada de Putin

Por: Alberto López Girondo

El reconocimiento de la independencia de las repúblicas del Donbass y el envío de tropas rusas para proteger a ambas regiones de ataques ucranianos plantea al riesgo de una guerra devastadora no solo para Europa.

Vladimir Putin se lanzó a la jugada más arriesgada en sus casi 23 años en el poder en Rusia y puso a Europa en el trance más peligroso desde el fin de la Segunda Guerra Mundial y a EEUU en el desafío de mostrar hasta dónde está dispuesto a llegar el gobierno de Joe Biden para sostener su rol de gendarme internacional. El resto del mundo mira preocupado la situación en Ucrania, donde se podría estar incubando la batalla final para la humanidad, si es que realmente los contendientes deciden utilizar el armamento nuclear de que disponen.

No es la primera vez que Rusia recurre a una movida semejante para intentar mantener o recuperar si no el territorio, al menos la influencia que alguna vez tuvo la Unión Soviética y que perdió desde su disolución, el 25 de diciembre de 1991. Y no es necesario ningún contacto con los servicios secretos rusos, de los que proviene el inquilino del Kremlin, para adivinar sus movidas.

Hace meses que Putin viene advirtiendo que para Moscú, la OTAN debe regresar a las fronteras de hace 30 años, y que el avance hacia el este europeo violó todas las promesas y garantías que se hicieron en su momento a los gobiernos de Mijail Gorbachov y Boris Yeltsin. Lo puso por escrito en un documento que presentó en diciembre pasado.

Puede cuestionarse la legalidad y hasta la legitimidad del reclamo, lo que no se puede negar es que en política internacional, rige la ley del más fuerte. Hasta no hace tanto, esa ley no escrita y tampoco derogada, fue la que permitió el avance atlantista sobre ex repúblicas soviéticas hasta las narices mismas de Moscú. En Asia, en tanto, la OTAN también acompañó a EEUU en sus desastrosas aventuras en Irak y Afganistán, mientras que en África participó de la invasión a Libia, un país destruido tras esa incursión.

Luego del asesinato de Muhammar Khadafi, en octubre de 2011, el foco de la administración de Barack Obama y de su secretaria de Estado, Hillary Clinton, giró a Siria, donde el objetivo era el presidente Bashar al Assad. Pero ahí chocaron con un obstáculo que no se esperaban: Moscú salió en defensa del gobierno sirio y un poco porque allí tenía su única base militar en el Mediterráneo, en Tartús, otro poco porque ya era evidente que EEUU no podría seguir manteniendo tantas guerras simultáneas en su aspiración por controlar el planeta, el caso es que desde ese momento las tropas rusas salieron del letargo. Y Putin demostró que la Rusia del siglo XXI aspira a ser un factor de poder global y tiene con qué.

Desde entonces, también, los sectores antirrusos fueron ganando espacio en el “estado profundo” de la burocracia estatal norteamericana. Fue tan así que el triunfo de Donald Trump fue atribuido a injerencia rusa en las elecciones de 2016 y los grupos ligados a la ex canciller fustigaron desde antes de que asumiera al nuevo mandatario acusándolo de connivencia con el Kremlin. La venganza de Trump -que enfrentó un primer juicio político por acusaciones contra el hijo de Biden por sus negocios no tan claros en Ucrania- fue decir este mismo martes que si el hubiese sido reelegido, Putin no hubiera reaccionado como lo hizo.

Mas allá de las chicanas, lo cierto es que la OTAN es un agujero negro presupuestario para Washington y que Trump pretendió -a lo bestia, como todo lo suyo- que los europeos pagaran más por su seguridad. Una amenaza de guerra es un buen negocio para la burocracia militar de la organización atlántica, que así justificaría su existencia. Y también para que con Biden, se cumpliera el objetivo de Trump de que hagan mayores aportes.

El reconocimiento de la independencia de Lugansk y Donetsk, previsible en cierto modo, puede representar que la advertencia del actual secretario de Estado Antony Blinken sobre una invasión rusa a Ucrania tenía bases reales. También acelera el enfrentamiento entre la administración demócrata y Moscú, que mientras estuvo en el poder Trump se tuvo que limitar a operaciones mediáticas sobre el peligro ruso.

Trump, por su parte, pretendió cerrar negocios por la venta de gas de francking estadounidense en reemplazo al que Rusia envía a Alemania. Un caño con el precioso combustible que alimenta el 40% de la industria y calienta a los hogares germanos pasa por Ucrania, el territorio en disputa. El otro es el gasoducto Nord Stream 2, listo para entrar en acción desde septiembre pasado a pesar de presiones y amenazas del gobierno Trump.

Ahora, el canciller Olaf Sholz anunció que como castigo por el reconocimiento de la independencia de las repúblicas del Donbass, suspende el proceso de aprobación de la tubería. Una millonaria obra de la que participaron empresas rusas, alemanas y franceses. Scholz, junto con el presidente Emmanuel Macron, fueron los más febriles negociadores en un intento de frenar a Putin.

Saben que la escalada perjudica sobre todo a Europa, donde está en frente de batalla. Pero el presidente ruso sabe, también, que quien corta el bacalao en ese continente, es Estados Unidos, y no acepta hablar con intermediarios. Como será que la sanción de Berlín, en la práctica, será sufrida más por los alemanes que por los rusos. Y a quien beneficiará será a los productores de gas estadounidenses, más caro porque debe transportarse por buques. Productores amigos y muy de votar por Trump.

Compartir

Evaluar en clave pública

El ministerio a cargo de Struzenegger evaluará a los trabajadores estatales mediante el denominado “Sistema…

16 mins hace

Diego en cada rincón: arte, pueblo y memoria en «Solo el Pueblo»

Un viaje visual que celebra la conexión entre Maradona y los barrios populares. La exposición…

29 mins hace

Trolls libertarios quisieron boicotear a Lali pero su nuevo tema ya es un éxito

Spotify hizo un post promocionando el último lanzamiento de la cantante. A los seguidores del…

1 hora hace

Alberto Fernández declaró por la Causa Seguros y negó las acusaciones en su contra

El ex presidente declaró este miércoles luego de que el juez federal Julián Ercolini rechazara…

2 horas hace

La Inteligencia Artificial se mete en las redes sociales: ¿qué queda para la privacidad de los usuarios?

X (ex Twitter, de Elon Musk) anunció que su asistente Grok utilizará los posts públicos,…

3 horas hace

Apelina: una nueva esperanza en la lucha contra la hipertensión

La hipertensión arterial es el factor de riesgo cardiovascular más frecuente. Sin embargo, a pesar…

3 horas hace

Francos defendió en el Senado la reducción de un Estado «elefantiásico y corrupto»

El Jefe de Gabinete expone su informe de gestión en la Cámara Alta. Antes se…

4 horas hace

Javier Cercas y su ingreso a la Real Academia Española

El famoso autor de “Soldados de Salamina” ocupará la silla R que dejó vacía Javier…

5 horas hace

Roma Ramírez: «En este disco, quise apelar a la alegría y a las emociones vibrantes, necesarias para seguir de pie»

La cantante platense lanzó su disco “Alma Florida”, en el que despliega todas sus influencias…

5 horas hace

Más de 90 merenderos y comedores denuncian abandono por parte del Gobierno porteño

En conferencia de prensa, las organizaciones aseguraron que hasta la fecha asisten con recursos propios…

5 horas hace

Condenaron a dos penitenciarios por encubrir el homicidio de Federico Rey

Los penitenciarios fueron condenados a dos y tres años de prisión con ejecución condicional e…

5 horas hace

Revelaron el primer tráiler de la esperada “Cien años de soledad”

En menos de un mes llega a Netflix la serie basada en la obra de…

5 horas hace