Un spray nasal con un principio activo antiviral podría convertirse en un importante aliado en la lucha contra la pandemia de coronavirus. La semana que viene, un equipo de investigadores del Conicet comenzarán en dos hospitales porteños los ensayos clínicos para evaluar su capacidad de impedir que el virus ingrese al organismo a través de la nariz, principal vía de infección.
Este spray nasal, ya aprobado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), tiene como principio activo la carragenina, una molécula obtenida a partir de un tipo de algas rojas (llamadas “musgo irlandés”) usadas en la industria farmacéutica. Al ser un compuesto con carga eléctrica negativa, la carragenina interactúa con las cargas positivas de la superficie de las partículas virales, evitando así la penetración de los virus en las células del huésped.
“Numerosos estudios han descripto el potencial antiviral de la carragenina contra distintos tipos de virus respiratorios, como el del resfrío común, el de la influenza y algunos coronavirus. Pero, hasta donde sabemos, todavía nadie probó en seres humanos el efecto de la carragenina sobre el SARS-CoV-2”, reveló Osvaldo Uchitel, investigador del Conicet, en declaraciones a NEXCiencia, el sitio de divulgación de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.
Uchitel, director científico del proyecto que financia el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, advirtió que “en pocos días iniciaremos los ensayos clínicos con un spray que contiene carragenina para probar su efectividad contra el SARS-CoV-2”.
El spray se aplica cada cuatro a seis horas en cada orificio nasal, y el procedimiento es tan sencillo que puede hacerlo cualquier persona sin necesidad de asistencia profesional.
Los ensayos se realizarán en el Hospital Británico y en el CEMIC, pero ya hay tratativas para extender el estudio a centros de salud del Conurbano.
El proyecto apunta a administrar el medicamento a tres poblaciones. Una es el personal de salud que trata a pacientes con Covid-19, para “ver ver si podemos protegerlos disminuyendo la tasa de infección que los afecta actualmente”, señaló Uchitel. Otra población que ingresará al estudio son los pacientes que se internan con un cuadro leve de la enfermedad: “Deben iniciar el tratamiento dentro de las 48 horas de efectuado el diagnóstico y aplicarse el spray durante unos 20 días. La expectativa es evitar que esos pacientes se agraven y tengan que pasar a terapia intensiva”.
El estudio también se llevaría a cabo en zonas donde pudiera surgir algún foco de infección, administrando el medicamento a los contactos cercanos para disminuir la probabilidad de contagios.