Diez series para empezar el año sin parpadear

La nueva era de las series llegó para quedarse. Conquistó las preferencias de consumo audiovisual de las mayorías (adultos y adolescentes) y ganó prestigio suficiente con premios Globo y nominaciones al Oscar (de a poco hasta se le atreve a su hermano mayor, el cine). Mientras tanto, se expande: durante 2019 debutarán las plataformas de streaming de Apple y Disney (Disney+). Como hace cien años lo hacían los grandes estudios cinematográficos, primero ganaron a las masas, y ahora van por los infantes. Netflix, por citar sólo un ejemplo, también pone el acento en las producciones para los más chicos, sin dudas ellos serán sus grandes consumidores en las próximas décadas.

A diferencia del cine, la televisión por aire o el cable (por más cartelizados que estén), las plataformas de streaming no compiten entre sí: trabajan sobre audiencias cautivas. En ese sentido, algunos analistas advierten sobre la calidad de los productos por venir. Más que nada sobre (y valga la paradoja) la producción en serie. De hecho, las grandes series que marcaron la década a punto de terminar todavía no encuentran equivalente en las consagradas recientemente o las nuevas que se anuncian. Sí hay muchas y varias muy buenas. Acaso los modos de consumo también se están modificando en este punto: las series tienden a ser más cortas en cantidad de capítulos y temporadas. Si cada vez menos personas leen textos extensos, ¿por qué seguirían una historia por varias temporadas? Pero la sensación de vacío nunca alcanza a los consumidores. Las productoras de contenidos siempre ofrecen múltiples novedades para casi todos los gustos.

A continuación, diez títulos que representan lo que algunos sospechan un año bisagra: se despiden algunos de los últimos dinosaurios de la década más prodigiosa (excepto Los Soprano y 24, todas las series que marcaron época tuvieron su punto máximo en la década que llega a su fin). Cinco que renuevan temporada y cinco estrenos, de esos que, se sospecha, pueden llegar a dominar el inicio de la próxima década, cuando los centennials comiencen a luchar por un lugar en el mundo adulto. «

GAME OF THRONES

Sin duda, el acontecimiento audiovisual no cinematográfico de 2019. Incluso para los que nunca siguieron GOT, esta temporada es imperdible: de ella se hablará por mucho tiempo. Luego del año sabático que la serie se tomó durante 2018, más por razones estratégicas de su productora, HBO, que por cuestiones artísticas, las expectativas crecieron sobremanera. La serie más popular de los últimos tiempos (sin contar The Walking Dead) se despide, entre otras cosas, porque ya tiene poco para decir sobre estos tiempos: el mundo político que representa (tan del siglo XX), ese en el que la lucha sangrienta es relevante, pero la búsqueda de legitimidad y cierta trascendencia lo son más, si no está en desuso total, al menos está en retirada. El 14 de abril se estrenará el primer capítulo de la octava y última temporada de una serie que ya hizo historia.

SEX EDUCATION

Estrenada por Netflix el 11 de enero, la comedia con toques trágicos que cuenta los avatares de la iniciación sexual (y de la adolescencia en general) ya se convirtió en verdadero furor en el mundo teen. Una serie que seguramente los hijos no querrán ver con sus padres, pero que sin dudas ambos pueden seguir. No sólo por lo que una parte puede aprender de la otra, sino porque la frescura con la que está narrada permite casi la eliminación de cualquier prejuicio para recibir lo que ofrece. De una ternura que hace acordar a la entrañable Freaks & Geeks, Sex Education muestra sin tabúes lo que les sucede con el sexo a los jóvenes y, en menor medida, a sus padres en esa etapa de la vida.

HOMELAND

La otra gran despedida del año llegará en junio, según anunció en septiembre pasado Showtime, la cadena que la produce. Surgida en 2011, con estrenos de temporada en octubre de cada año, la serie que siempre seguía el paso a paso de la política exterior de Washington nunca había vivido un cambio de inquilino en la Casa Blanca. Ante el novedoso panorama de 2016, la producción decidió postergar el estreno de su sexta temporada a enero de 2017. Como los tiempos no daban para esperar el resultado eleccionario y se veía asomar con fuerza la ola feminista, Homeland decidió que ganaría una mujer (¿Hillary Clinton?). El resultado –electoral y de la ficción– no pudo ser más desalentador. La octava y última temporada de la historia de Carrie Mathison (un agente de la CIA con trastorno bipolar) dará mucho que hablar.

THE WALKING DEAD

Una semana después de su estreno en EE UU, la señal Fox Premium emitirá esta noche en la Argentina el primero de los ocho nuevos episodios que completan la novena temporada de TWD. Se trata de un éxito global por longevidad y cantidad de seguidores –desde Fox la promocionan como la serie más exitosa de todos los tiempos–, que pulverizó los cálculos más optimistas para cualquier producto que incluya muertos que caminan, plagas y terror. TWD se permite apostar más a la historia que a los personajes y hasta le moja un poco la oreja a la era de las maratones y estrena un capítulo por semana. El apocalipsis sigue imponiendo sus crueles reglas, la desaparición de Rick generó una crisis profunda y los juegos de la supervivencia no se detienen. La salud de estos muertos vivos es tan buena que se confirmó que en octubre se estrenará la décima temporada.

THE UMBRELLA ACADEMY

Una de las que viene con más prensa se lanza este viernes por Netflix. Las expectativas mediáticas que despertó en gran medida se las debe a que es una adaptación del cómic de Gerard Way, que cuenta la historia de varias personas con superpoderes que, de jóvenes, asistieron a un instituto especial para aprender cómo usar sus destrezas. El presente los vuelve a juntar por la dudosa muerte de su padre adoptivo, también fundador de la academia. Más allá de la prensa, el entusiasmo es grande porque representa la apuesta de Netflix en el mundo del cómic luego de que se rompió su acuerdo estratégico con Marvel (de ahí que Jessica Jones y Daredevil hayan terminado casi abruptamente).

RILAKKUMA Y KAORU

La serie con la que Netflix, a partir del 19 de abril, espera empezar a conquistar las emociones y las cabezas de los niños. «Kaoru ahora comparte su hogar con un oso de peluche que ama, no hacer nada en todo el día, ¡pero es imposible odiarlo!», define la plataforma a su producto, toda una innovación en el medio. Se trata del primer lanzamiento de stop-motion producido por una compañía de streaming. El tráiler que adelanta el lanzamiento presenta a unos muñecos que mezclan la técnica occidental con la forma kawaii adoptada de Japón. Rilakkuma y Kaoru promete hacer ruido entre las preferencias de los niños y asegura un tsunami de merchandising.

BIG LITTLE LIES

La serie que sorprendió al mundo (incluso, tal vez, a la propia HBO) tendrá a partir del 19 de febrero su segunda temporada. El éxito de crítica y premios (quizás no tanto de público), convenció a Meryl Streep de hacer su primera incursión en el mundo de las series. Así, además de las estrellas protagónicas Reese Witherspoon, Nicole Kidman y Jane Chapman, se suma Streep en el papel de la madre del marido de Kidman. Para evitar el spoiler es mejor ver la primera temporada, ya que habrá continuidad en la historia en la serie más feminista de los últimos años junto a The Handmaid’s Tale. La expectativa es grande porque el cierre de la primera temporada fue casi perfecto. Al mismo tiempo, muchos se preguntan cómo continuará la historia y hasta qué punto los guionistas podrán extenderla sin quebrar la idea original.

KILLING EVE

Una de las series sensación de 2018 regresa con su segunda temporada casi sin mediar descansos. El 7 de abril se concretará la vuelta de la historia que intenta dar cuenta de los amplios cambios que trajeron las nuevas conquistas de las mujeres en el mundo contemporáneo. Pero hace foco en uno de los aspectos menos tratados: el del crimen y el policial. Villanelle (Jodie Comer) y Eve Polastri (Sandra Oh) encabezan un relato sobre un amor sororo que no se manifiesta en el sexo (al menos por ahora), ni en la competencia. Basada en la saga de novelas Codename Villanelle del autor británico Luke Jennings, el siempre atractivo juego de las persecuciones adquiere una dimensión extra gracias a la profundidad y matices de los dos personajes centrales y su singular vínculo. Sandra Oh recibió un Globo de Oro por su actuación en Killing Eve.

SHRILL

La plataforma Hulu sigue con su apuesta por los temas del feminismo y, además, intenta ganar espacio contratando grandes figuras. Aquí está el ejemplo del acuerdo alcanzado con la actriz y humorista Aidy Bryant para lanzar esta comedia de seis episodios. Desde el 15 de marzo, la actriz de Saturday Night Live va a protagonizar a «una joven gorda que quiere cambiar su vida, pero no su cuerpo». Bryant encarnará a Annie, una periodista que debe lidiar con novios incorrectos, padres con problemas de salud y un jefe obsesivo. Acomodar todas esas circunstancias no le resultará sencillo, pero ofrecerá un marco ideal para que la actriz despliegue su talento.

TURN UP CHARLIE

Una opción para un público más adulto, que tiene varias series para esperar este año pero pocas con fecha confirmada. Turn Up Charlie se estrenará el 15 de marzo y es el intento de Idris Elba (The Wire, Luther) de moverse en nuevos territorios creativos. En tono de comedia, hará de un DJ que fracasa de manera crónica en su afán de ser famoso. Cuando el éxito parece a punto de tenderle la mano, su soltería empedernida y sueños de jet-set se verán cuestionados al transformarse –casi a la fuerza– en el niñero de la hija de su mejor amigo. Elba es coproductor de Turn Up Charlie y, además de un gran actor, DJ en la vida real.