Colombia: continuidad de una crisis latente

Por: Javier Calderón Castillo

A cinco meses de iniciado un estallido social sin precedentes en Colombia, no se resuelve la situación que la originó: continua la crisis de legitimidad del gobierno de Iván Duque, mientras que el hartazgo social sigue siendo la emoción predominante. La pandemia dejó de ser el tema central, la agenda del país tiene como ejes el hambre, la represión y el descontrol gubernamental. Asuntos medulares de una crisis con un asunto de fondo: el neoliberalismo persistente y violento aplicado en el país.

No se puede olvidar que el estallido social comenzó en contra de un mega ajuste propuesto por el gobierno a través de una reforma tributaria regresiva, donde ponían más impuestos a las y los trabajadores, y ampliaban las exenciones para los que más tienen. La sociedad reclama cambios en las calles, mientras el grupo que controla el gobierno está enfocado en no dejar nada en pie (eso significa nada en las arcas del Estado), sienten el ocaso y se aferran a utilizar los dineros públicos para controlar el sistema clientelar o transaccional enfocados en las elecciones del próximo año (parlamentarias marzo, presidenciales en mayo).

En contravía de la historia o de la razón (si se me permite el término), Iván Duque negoció con las bancadas de los partidos de derechas en el Congreso de la República, y el pasado 9 de septiembre aprobó una Reforma Tributaria sin concertar, ni siquiera dialogar con el Comité Nacional del Paro, quienes vienen insistiendo en reformas de fondo y de largo plazo que resuelvan la crisis con una estructura distinta del empleo y de los salarios. El gobierno (en un tono caprichoso) sin mediar discusión, se decantó por poner unos paños de agua tibia, mostrando a la galería que los empresarios deberán pagar un poco más de impuestos (en realidad lo mismo que pagaban antes de 2019) y como “novedad” aplicar “austeridad” con la supresión de entidades del Estado, aunque en realidad sólo suprimirá algunas de las 14 consejerías creadas por él desde el 2018.

Nada sustancial en realidad, pues el país se pierde en la deriva del desempleo, de la precariedad laboral, de la reconfiguración del conflicto armado en algunos municipios. Un país atado a una matriz productiva insostenible para contener a 34 millones de personas disponibles para el mercado de trabajo. En el gobierno todo sigue igual, no quisieron escuchar las voces de la sociedad reclamando cambios. Iván Duque siguió hablando de Venezuela en la ONU (para vergüenza de muches), mientras las muertes de manifestantes (75), las violaciones (28) y las desapariciones (68) durante el Paro Nacional, siguen en la impunidad.

Por ello la movilización sigue su curso. El Comité Nacional del Paro (el espacio de coordinación de sindicatos, organizaciones sociales y populares) continuó convocando a jornadas de protesta en todo el país, la más reciente fue el 28 de septiembre. Se movilizaron sectores estudiantiles, sindicales y sociales en importantes marchas en las capitales de departamentos (provincias) y en algunos “puntos de resistencia” pacíficos establecidos en los barrios populares desde abril, con un notorio agotamiento en la convocatorio, pero con mucha legitimidad. Estas organizaciones mantienen dos reclamos fundamentales: dialogar sobre un pliego de 16 puntos (que contiene una propuesta de Renta Básica, educación para jóvenes, y de impuestos progresivos, libertad a presos y presas políticas, detenidas durante las movilizaciones, etc.), y detener la represión militar y policial, desplegada en las ciudades.

Es una situación que parece irresoluble en los próximos meses, Duque -con el 75% de desaprobación- insiste en una salida elitista de la crisis con represión y acuerdos con los partidos de derechas, y las organizaciones sociales, sindicatos y la oposición política, sigue movilizada, manteniendo abierta la disputa y ahondando las grietas del país. Al próximo gobierno le corresponderá abordar la crisis, ojalá desde otra perspectiva política, mientras tanto, en los diez meses de mandato que le restan al presidente Duque -des espaldas a las mayorías-, seguirá gobernando apoyado por las cofradías palaciegas y descargando su responsabilidad política en la militarización. El país formal de Duque seguirá su rumbo autoritario, mientras el país real seguirá latiendo en las calles.

Compartir

Entradas recientes

El programa cambiario de Milei necesita una inyección de dólares

El presidente quiere mantener el ancla cambiaria hasta las elecciones de octubre. Pero el dólar…

4 horas hace

Ayudado por senadores «con peluca» Milei llega protegido a la apertura de sesiones

El presidente le hablará a la Asamblea Legislativa en medio del criptogate. Sin embargo, contabiliza…

4 horas hace

Cristina reúne al PJ en medio del cimbronazo que produjo la movida kicillofista

La reunión estaba pensada para analizar la situación en el marco del criptogate y el…

4 horas hace

Especialistas advierten que EE.UU. podría avanzar rápido en la investigación

Hubo reportes ante el FBI y el Departamento de Justicia. Un estudio de Nueva York…

5 horas hace

El ajuste y el saqueo necesitan una sociedad desinformada

El escándalo del viernes 14 de febrero fue un reflejo del país y la sociedad…

5 horas hace

Una foto con Trump, el «logro» del viaje de Milei a Estados Unidos

El encuentro de los presidentes duró 10 minutos. Fue después del discurso del mandatario argentino…

5 horas hace

Criptogate: Milei quedó imputado en Argentina y en la mira de EE UU

El fiscal Taiano impulsó la investigación por abuso de autoridad, estafa, tráfico de influencias y…

6 horas hace

Para los analistas, el tema cripto es una «crisis de sombra larga»

Gustavo Córdoba y Julieta Waisgold coinciden en la penetración transversal del escándalo en la opinión…

6 horas hace

Kicillof sorprendió con el lanzamiento de su espacio político y la lista de apoyos

En una jugada imprevista, lanzó el Movimiento Derecho al Futuro, con el que busca erigirse…

6 horas hace

Lorena Vega: “Envidiosa pone en primer plano mandatos sociales que no fueron superados”

Es una de las actrices y directoras más reconocidas del teatro off. Pero la psicóloga…

6 horas hace

Hilda Herrera y su cautivante gramática de horizontes, caminos y silencios

La gran pianista y docente cordobesa de 92 años publicó dos discos casi en forma…

7 horas hace

Ping pong con Un Rubio Peronista: “Es muy difícil hacer humor sobre Milei porque es un chiste en sí mismo»

Nació a partir de los lockout de las patronales agrarias por la 125, ganó gran…

7 horas hace