Ping pong con Alan Sabbagh: “Quería entender cómo era eso que veía en las películas”

Por: Nicolás Peralta

Empezó a estudiar actuación casi por casualidad, descubrió su pasión y construyó una carrera siempre en ascenso. El placer de hacer reír y la cocina como refugio.

Nacido en el barrio de Belgrano hace 43 años, Alan Sabbagh es un actor que siempre se destaca, aunque no sea la figura central. Con gestos simples y un carisma único se fue haciendo su lugar, muy de a poco, hasta conseguir una presencia envidiable en proyectos de gran llegada. Últimamente hizo de las suyas en series como El encargado, División Palermo y Coppola, el representante, entre otras. Y en películas como El sistema Keops, Que todo se detenga y El método Tangalanga.

El teatro no es su espacio más transitado. Pero trabajó en obras como Carlos en el centro, Los quiero a todos y Bésame un poco. “En algún momento  me gustaría hacer más teatro y también dirigir una película. Escucho ofertas”, remata Sabbagh con picardía.

-¿El arte de la actuación es invitar al otro a pensar la realidad?

-Últimamente no me estuvieron tocando muchos papeles como para pensar demasiado la realidad. Vengo de mucha comedia, pero bueno, sí, te puede ayudar a repensar cosas. Yo busco historias divertidas y me apasionan los personajes simples que te permiten identificarte o te hacen acordar a alguien.

Pedro Almodóvar.

-¿La comedia es tu lenguaje?

-Me gusta hacer reír a la gente. Pero hago de todo, lo que toque. Es verdad que me llaman más para hacer roles en comedia y los disfruto, trato de que a la gente le guste y quede un lindo recuerdo. Me gusta que la gente recuerde mis personajes con una sonrisa, siempre es algo bueno.

-¿Cine, tele o teatro?

-Son lo mismo, para mí. Se trabaja diferente, pero a la hora de elegir un laburo, no armo dicotomías de esto o lo otro. Todo se disfruta, aunque sea de distinta manera.

Woody Allen.
Foto: AFP

-¿Por qué sos actor?

-A los 17 años me mandé a una clase por curiosidad. Nadie en mi familia había tenido jamás una experiencia en el rubro. Y me gustó, me sentí cómodo. Quería entender cómo era eso que veía en las películas. De a poco se fue abriendo el panorama y acá estamos.

-¿Qué te gustaba ver?

-Soy de la época del videoclub. Pulp fiction, Pecados capitales, La Máscara, Sueños de libertad, El fugitivo, Quisiera ser grande, Volver al futuro, ese tipo de películas. Hacía maratones con las de Scorsese, David Fincher, Pedro Almodóvar y especialmente con Woody Allen, que es uno de mis directores favoritos.

Martin Scorsese.
Foto: AFP

-¿Tu papá de qué trabajaba?

-Fue textil, pero después vendía iluminación, negocio con el que continúo. Me encantaba acompañarlo al trabajo. O quizás lo esperaba en un bar tomando una Coca, me gustaba mucho mirar a la gente, esa aura porteña… Soy muy de ciudad.

Boca, otra de las pasiones de Sabbagh.

-¿Cuál era tu trabajo soñado de chico?

-No soy nada original: quería ser futbolista. Me encantaba jugar al fútbol. Soy de Boca y si me preguntaban qué quería en la vida, era hacer un gol en la Bombonera. Pero no pasó más de ser un sueño infanto-juvenil. Me fui para otro lado solito.

-¿Cuál es tu pasión actual por fuera de tu trabajo?

-Me gusta la cocina, es un lugar en el que me concentro mucho, es un momento especial y me permite pensar personajes, ideas. Cocino mucho. Si no fuese actor, creo que mi laburo hubiese estado en la gastronomía. En la soledad de la cocina, me relajo como en ningún otro lado.

Sabbagh en el preestreno de El método Tangalanga.

-¿Una buena idea siempre funciona?

-Depende de muchos factores. A veces camina y otras no cierra y vas mutando: lo que iba a ser una película termina siendo una serie. O nada. Que algo funcione depende de un combo que es difícil de prever.

-¿Cómo piloteás la incertidumbre de los problemas en la economía?

-Sé que soy privilegiado por tener trabajo. Yo solo te puedo hablar desde mi lugar: cuando me toca tener baches largos, como pasa a veces en mi profesión, siempre afronto ese tiempo en forma positiva, así me enseñaron y así soy. Es una carrera sinuosa y la paciencia es la pieza clave. Nunca tenés la vaca atada y menos ahora que hay menos laburo.

Pulp Fiction.

-¿De qué otra cosa laburaste?

-De todo. Vendí telas, zapatos, anteojos: siempre encontré la forma de diversificarme y encontrarle la vuelta. Tengo un local de iluminación en el Once y eso me permite también mantener otra tranquilidad, pero siempre busco hacer lo mejor para lo que me gusta.

Volver al futuro.

-¿Qué música disfrutás?

-De todo, pero más el rock. Los Guns N’ Roses, Nirvana, Pink Floyd, los Rolling Stones. Siempre clásico. De adolescente iba mucho a ver a Babasónicos, Los Brujos y esos grupos. Todavía los escucho, me gustan. Ahora estoy en una etapa más de viejo, me pongo jazz, algo tranqui.

-¿Qué pensás del trap?

-No lo entiendo. Me parece inescuchable. Pero siento que es lo que le pasó a mi viejo con el tango y el rock. Y ahora me pasa a mí. No entiendo un pomo. Pero bueno, no digo que sea malo, sino que yo ya soy un viejo choto (risas). «

La Máscara.

Ping pong con Alan Sabbagh

Compartir

Entradas recientes

En medio de otra ola de cierres, el gobierno lanza la segunda fase del industricidio

El Ejecutivo tomó dos medidas que comprometen la competitividad del sector manufacturero. Allanan el camino…

1 hora hace

Libertarios apurados, el helado se derrite

Evaluando la situación real de la economía se entiende cómo le aprieta el zapato al…

1 hora hace

La Hidrovía: trastienda de la batalla silenciosa entre Milei y Macri

El expresidente patrocina a la empresa de la reina Máxima para quedarse con la vía…

1 hora hace

En el PJ sostienen que «Ficha Limpia» es una nueva cortina de humo

Referentes de distintos sectores de Unión por la Patria coinciden en que el proyecto firmado…

1 hora hace

La estrategia de Cristina para reorganizar el peronismo provincia por provincia

En el próximo mes, la expresidenta definirá el sistema de alianzas en Santa Fe, Corrientes…

1 hora hace

La «nueva» América

El nuevo gobierno enfrenta muchos desafíos económicos y de relaciones exteriores.

1 hora hace

Cómo Trump y Putin redibujan la Nueva Ucrania

Con la segunda llegada de Donald John Trump a la Casa Blanca, se abren escenarios…

1 hora hace

Casi tres millones de palestinos, con expectativas y dudas, se aprestan a regresar a sus hogares

A horas de la implementación de la primera etapa de la tregua, Israel seguía atacando…

1 hora hace

Mañana será otro día, pero no cualquiera

La concentración de la riqueza y la desigualdad son escandalosas y la inflación hizo estragos.…

1 hora hace

Cuando arden Los Ángeles

¿Qué parte le toca al calentamiento global producto de las actividades económicas en estos fuegos…

1 hora hace

El frío extremo y la extrema derecha acompañarán a Trump en su regreso triunfal

Será la primera vez en 40 años que el juramento se tome dentro del Capitolio,…

1 hora hace

Alcohol y violencia sexual: Hegseth lleva su prontuario al Pentágono

Cumplió tareas de guardián e interrogador, quizá torturador, en la Base Naval de Guantánamo, territorio…

1 hora hace