El presidente Alberto Fernández anunció este lunes que denunciará en la justicia para que se investigue “penalmente” a los magistrados, funcionarios porteños y directivos del Grupo Clarín que viajaron a Lago Escondido. Las maniobras -que se describen en el chat que dio a conocer Tiempo Argentino- para tratar de encubrir la reunión en la casa del británico Joe Lewis en donde Mauricio Macri fue el anfitrión, estaban destinadas a tratar de encubrir ese encuentro.
Tras el escándalo el presidente brindó un mensaje grabado a la población desde Casa Rosada. Desde allí anunció que le pidió al ministro de Justicia Martín Soria que se presente en el Ministerio Público Fiscal para que se “investiguen penalmente los hechos relacionados al viaje en cuestión, en especial, lo relacionado a su financiamiento”.
Además, anunció que le pidió al representante del Poder Ejecutivo, Gerónimo Ustarroz -primo del ministro del Interior Eduardo “Wado” de Pedro- que solicite “la apertura de un sumario ante la Comisión de Disciplina para investigar la conducta de los magistrados federales”.
Asimismo, el presidente le pidió al bloque de legisladores porteños, conducido por Claudio Ferreño, un dirigente de confianza de Alberto, que “evalúe la conducta de los funcionarios de ese distrito involucrados y, de corresponder, presentar el Juicio Político a los funcionarios de la Ciudad involucrados”. Entre esos funcionarios se encuentra el ministro de Seguridad y Justicia de Horacio Rodríguez Larreta, Marcelo D’ Alessandro, quien este lunes por la mañana se quejó por Twitter de la difusión del encuentro.
El presidente volvió a insistir con la sanción de la reforma judicial que no tiene tratamiento legislativo en Diputados y por “la necesaria cobertura del cargo de Procurador General de la Nación”, que está ocupada de manera interina por Eduardo Casal, designado por el macrismo hace seis años.
“Desde el inicio de mi gestión he advertido sobre la existencia de sótanos que la Argentina fue sosteniendo a lo largo de los años. Me comprometí a eliminarlos para garantizar una democracia más plena, profunda y auténtica”, comenzó el presidente su discurso.
El mandatario sostuvo que desde su gobierno se puso “fin a los operadores y mesas judiciales”. “Los servicios de inteligencia dejaron de deambular por pasillos de los tribunales. Las escuchas de opositores al poder de turno del Estado desaparecieron por completo. Los órganos de fiscalización y recaudación estatales no volvieron a usarse en perjuicio de eventuales críticos al gobierno”, sostuvo en cadena nacional.
“Todo ese esfuerzo se vuelve vano cuando los factores de poder influyen negativamente sobre las estructuras del Estado. Argentina necesita de una vez y para siempre de funcionarios honestos, jueces probos y empresarios que obtengan sus ganancias sin corromper a otros”, opinó.
Es que en octubre Página 12 dio a conocer detalles de un viaje que realizaron un grupo de jueces, fiscales, funcionarios del gobierno de Larreta y ex agentes de la Agencia Federal de Inteligencia, en un avión privado, hasta Lago Escondido. “Parece evidente que el viaje existió. Y todo parece indicar que, sabiendo que el hecho se había convertido en noticia, quienes habrían participado del mismo se inquietaron ante el riesgo cierto de estar incursos en una serie de delitos tales como la percepción de dádivas y el incumplimiento de deberes de funcionario público. Contaban con una certeza: el principal grupo de medios de comunicación de Argentina garantizaría la no divulgación de los hechos. En apariencia, eran a la vez los convocantes al encuentro. Sabiendo eso, todos habrían comprometido sus mejores esfuerzos tratando de evitar que otros medios difundieran lo ocurrido”, relató el presidente.
“Por vez primera queda expuesto ante nosotros, con enorme contundencia, el modo en que ciertas corporaciones operan sobre funcionarios, jueces y fiscales procurando de ellos favores que, en muchos casos, buscan ventajas indebidas, mientras que en otros simplemente propician la persecución de aquellos que los enfrentan”, definió el presidente.
“Todo parece indicar que ha quedado al descubierto, una vez más, el deterioro de la calidad institucional en que han incurrido algunos jueces, fiscales, ex funcionarios y empresarios. Todos ellos involucrados en un perverso juego de cohechos que afecta gravemente el buen funcionamiento del Estado y, en particular, de la administración de justicia”, señaló.
El presidente sostuvo: “No dejo de advertir que lo que ha trascendido es, aparentemente, el resultado de la intromisión en una plataforma de comunicación. Pero eso no es obstáculo para indagar cuál ha sido el propósito de ese viaje, quiénes participaron del mismo y quien financió el traslado y hospedaje de los viajantes. Ese hecho se habría verificado con antelación al momento en el que los integrantes del grupo “Operación Página 12” se inquietaran por la difusión de la noticia y dialogaran en ese sitio digital buscando quedar impunes”.
El presidente también se refirió al encubrimiento de los medios opositores del escándalo que publicó Tiempo Argentino: “He decidido dar este mensaje desde la Casa Rosada, porque es evidente que gran parte del sistema de medios privados ha decidido no dar cuenta de lo ocurrido en ese singular viaje a Lago Escondido”.