El diputado nacional Carlos Castagneto presentó un proyecto de ley para declarar al pan como un bien social. La iniciativa propone “garantizar en todo el territorio de la República Argentina la adquisición del pan social o común con un precio federal accesible y de calidad” y establece que las personas físicas o jurídicas que elaboren y expendan o distribuyan el pan social tendrán el régimen especial tarifario previsto en la Ley Nº 27218.
“Está demostrado que el pan en muchas sociedades han ayudado a combatir la pobreza y, como sabemos, alimentarse es un derecho básico de todo ser humano. Debido a todas sus propiedades nutritivas, el pan es un ‘ingrediente’ inamovible de la base de la pirámide nutricional, ya que constituye también la base de la alimentación, cosa que, por otro lado, ha sucedido a lo largo de la evolución de la especie humana en la mayoría de las culturas”, expresó el diputado de Unidad Ciudadana.
El proyecto, que consta de ocho artículos, caracteriza al pan social o común al “producto perecedero, resultante de la cocción de una masa obtenida por la mezcla de harina de trigo, que puede contener sal comestible y agua potable, fermentada por especies de microorganismos propios de la fermentación panaria”. Y en su artículo quinto propone sustituir el inciso f del artículo 7º de la Ley de Impuesto al Valor Agregado, para incorporarlo, junto con el trigo, dentro de la lista de productos eximidos de ese tributo, junto con los preexistentes agua ordinaria natural, el pan común, la leche fluida o en polvo, entera o descremada sin aditivos, “cuando el comprador sea un consumidor final, el Estado nacional, las provincias, municipalidades o la Ciudad Autónoma de Buenos Aires u organismos centralizados o descentralizados de su dependencia, comedores escolares o universitarios, obras sociales o entidades comprendidas en los incisos e), f), g) y m) del artículo 20 de la Ley de Impuesto a las Ganancias «.
“En esta situación tan difícil, con el compromiso que tenemos como sociedad, y con el que me cabe como representante del pueblo de mi provincia de Buenos Aires, debemos garantizar el derecho de la libre accesibilidad al Pan como bien social, pues es el alimento símbolo que se comparte en familia”, expresó Castagneto.
Según el diputado, el proyecto surgió de “la observación de las dramáticas consecuencias de la economía neoliberal que implementa el gobierno y de las jornadas compartidas con las organizaciones populares que trabajan para paliarlas”. “Hoy lamentablemente, vemos una división entre los que trabajan y los especuladores financieros que viven de los que trabajan. Por nuestra parte, siempre estaremos abiertamente del lado de los que trabajan. Luego de 2 años y 9 meses tenemos pocas expectativas sobre un cambio de rumbo, aunque fuera una necesidad para millones de compatriotas. Por eso sabemos que si bien esta ley no es una solución, será un paliativo necesario mientras llegan, con el compromiso y la participación de las mayorías, tiempos mejores”, agregó.
El pan social ya existe en algunas localidades bonaerenses, como Mar del Plata, donde, por un convenio entre el Centro de Panaderos, el municipio y la Federación Industrial Panaderil de la provincia, el precio por kilo será de 39,50 pesos y se expenderá en 60 locales de la ciudad atlántica. Sin embargo, la declaración del pan como bien social a través de una ley le dará alcance nacional y respaldo reglamentario a lo que hasta ahora constituyeron iniciativas aisladas.