El 78% de los socios de IDEA dice que la actividad mejorará pero el 61% adelantó que no hará contrataciones.
El Informe de Expectativas de Ejecutivos de julio de la consultora D’Alessio Irol sistematizó respuestas de 212 socios del influyente instituto privado IDEA.
El 78% respondió que su perspectiva para el segundo semestre del año es que la economía será moderadamente mejor o mucho mejor. Pero el 61% adelantó que en su empresa el empleo se mantendrá congelado, disminuirá levemente o significativamente.
A la par, otro 34% dijo que el empleo aumentará moderadamente y apenas el 4% anticipó una creación significativa. Esta fracción de empresarios opera en firmas medianas del sector de los servicios.
La contradicción ilustra la incomodidad de los empresarios en la campaña electoral. El llamado Círculo Rojo es uno de los pilares ideológicos y financieros del proyecto de Cambiemos pero la decadencia económica también dejó un tendal de empresas en el camino. El hilo, como siempre, se corta por lo más delgado.
Los complicados
El impacto de la política oficial fue previsiblemente lapidario en los estamentos más bajos de la sociedad. En el primer trimestre la pobreza creció a un ritmo de 10.885 personas por día, según las estadísticas públicas. Eso fue, entre otras cosas, porque los despidos de personal de las empresas aumentaron el 339% entre enero y julio comparado con igual tramo de 2018 mientras que las suspensiones aumentaron otro 164,5%, datos de la consultora Tendencias en su informe de julio.
La fuente precisa que solo en julio despidieron a 5474 trabajadores y suspendieron a otros 8570 y agrega que los paros disminuyeron a la par de varios acuerdos paritarios importantes.
Según el Centro de Estudios sobre Trabajo y Desarrollo (Cetyd) de la Universidad de San Martín (Unsam) el empleo registrado en empresas privadas acumula 16 meses de caída. En junio, último dato disponible, el número de empleos formales era el más bajo de los últimos ocho años.
Semejante reducción se explica, según esa fuente, «fundamentalmente, por la decisión de las empresas de no cubrir las vacantes generadas por la finalización de contratos a plazo fijo, renuncias (jubilaciones, cambios de trabajo o salidas del mercado laboral) y despidos».
A eso se suma que las contrataciones están congeladas. En el sexto mes del año se verificó la menor tasa de contratación de los últimos 24 años después del pico histórico de mayo de 2002.
Fuera de la ley
Pero el cuadro es todavía más profundo. La pauperización generalizada del empleo y el salario condujo a los trabajadores desplazados a aceptar trabajos precarios. En resumen, se advierte una contracción de la actividad pero el empleo en negro y el cuentapropismo crecieron.
La política de empleo del gobierno nacional tiende a la insuficiencia. Incluso el propio presidente y sus funcionarios son los promotores centrales de proyectos de flexibilización y otras reformas macro que apuntan en ese sentido.
Sin embargo, el viernes la Justicia porteña suspendió a las aplicaciones de delivery de comidas Rappi, Glovo y Pedidos Ya hasta que regularicen a sus trabajadores y el mismo día los gremios aeronáuticos anunciaron una movilización para el 5 de agosto contra la precarización del sistema aerocomercial. Bloqueos puntuales a dos proyectos de flexibilización y desregulación paradigmáticos que el gobierno instrumenta como punta de lanza y promesa de que la discusión continúa. «
Penal de Olmos: la necesidad con cara de hereje
Diez cuadras de cola para acceder a una entrevista de trabajo para el servicio penitenciario. La escena estalló el lunes –no sólo por el éxito de convocatoria sino también por el empleo en cuestión– y ganó espacio en todos los medios nacionales además de convertirse rápidamente en objeto de debate.
Necesidad con cara de hereje. La imagen de cuadras y cuadras de personas jóvenes soportando el frío para postularse a uno de los 50 puestos de guardiacárcel en el penal de Olmos, en la localidad bonaerense de La Plata, graficó en forma contundente la situación del empleo en el país.
Y sorprendió a los candidatos del oficialismo que se vieron forzados a opinar sobre el tema en el problemático contexto de la campaña electoral. La gobernadora de la provincia, María Eugenia Vidal, apenas atinó a decir que los postulantes, todos jóvenes, no pretendían un trabajo sino «para estudiar».
En una entrevista para Radio Mitre, la referente bonaerense expresó que «para ser penitenciario se requiere un año de estudio, dos meses de práctica y un año más adentro del sistema. Las personas que hicieron la fila se inscribieron para el curso de capacitación. Tendrán que hacer el curso y aprobarlo. No es que mañana ya empiezan a trabajar».
Pero la respuesta de Vidal enardeció a la oposición. Entre otros, la candidata a vice de la Nación, Cristina Fernández, fustigó la «falta de sensibilidad» para reconocer el problema del empleo, mientras que el legislador Rubén Eslaiman, del Frente Renovador, apuntó que «preocupa que la gobernadora distorsione la realidad».
Justicia y gremios contra el modelo app de flexibilización
El viernes el juez Roberto Gallardo frenó a las aplicaciones de reparto domiciliario de comida Rappi, Pedidos Ya y Glovo.
Ese mismo día los gremios que integran el Frente Aeronáutico anunciaron una movilización para el 5 de agosto en repudio a la política aerocomercial de la Nación.
Se trata de dos sectores en los que el gobierno pisó fuerte para imponer su perfil de política laboral, tendiente a la liberalización y a la flexibilización de las condiciones en las que los trabajadores cumplen sus funciones.
Las aplicaciones de delivery son empresas que empezaron a operar durante el gobierno de Mauricio Macri y bajo la gestión de exministro de Trabajo Jorge Triaca, pero que prosiguieron con el sucesor Dante Sica a pesar de la férrea oposición del gremio de Motoqueros e incluso el surgimiento de un sindicato nuevo específico de las app.
La Justicia porteña les prohibió usar sus tarjetas de crédito y las exhortó a presentar las listas del personal empleado.
En el medio tienen prohibido operar, bajo amenaza de multa.
Luis Malvido, CEO de Aerolíneas Argentinas, declaró que «seremos algo así como el Rappi nacional, o el Glovo».
Los aeronáuticos que, en una línea similar, se oponen a la liberalización de los cielos argentinos y a la reforma sectorial que el oficialismo bautizó como la «Revolución de los Aviones», marcharán mañana en las instalaciones del Aeropuerto Internacional de Ezeiza desde las 9.
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