Mientras se agudiza la crisis y la recesión económica, la gobernadora María Eugenia Vidal y la ministra de Seguridad Patricia Bullrich anunciaron un mayor despliegue de las fuerzas federales de seguridad en diferentes puntos del Conurbano. La exposición pública de Vidal en este contexto le valió un fuerte cuestionamiento de un par de vecinos del lugar, a los que desairó.
El momento de mayor tensión se dio cuando la gobernadora se retiraba del acto del Parque de la Ciudad del partido de Quilmes. Tal como quedó plasmado en un video, una vecina le dice: “Los chicos en las escuelas no tienen comida. Este parque es un peligro, no pueden venir los chicos porque a las tres de la tarde hay chicos armados de 13 y 14 años. Es mentira todo lo que dice este gobierno. Nos estamos muriendo de hambre”.
En ese instante, Vidal dejó a la mujer hablando sola y se le escapó una leve mueca del rostro. “Nos estamos muriendo de hambre Vidal. A ver si lo entendés y no te rías, no seas cínica. Nos estamos cagando de hambre”, insistió otro vecino.
Sin decir una palabra, la gobernadora subió a su auto blindado y se retiró del lugar. Poco antes, en medio del acto, había dicho: «Estamos una vez más todos juntos, las fuerzas de Seguridad de la Nación y la Provincia, los ministros, todos los equipos, trabajando juntos por una prioridad de los vecinos bonaerenses: vivir en paz, estar más tranquilos, dejar de tener miedo. Estamos sumando todo el tiempo nuevas acciones para que la tranquilidad llegue».
Según se informó, Bullrich aportará 7.500 agentes de Gendarmería Nacional, Policía Federal, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria para que patrullen las calles de la Provincia. En el acto también estuvieron presentes el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo y los intendentes de Quilmes, Martiniano Molina; de Tigre, Julio Zamora; de San Fernando, Luis Andreotti; de San Isidro, Gustavo Posse; de Vicente López, Jorge Macri; de Lanús, Néstor Grindetti, y de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde.