La Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTA-A) bonaerense y el Centro de exCombatientes Islas Malvinas (Cecim) de La Plata repudiaron este viernes la convocatoria a los militares lanzada públicamente por el excarapintada Aldo Rico, ante la situación social y consideraron que su objetivo es «erosionar el sistema democrático».
«Frente a las irresponsables declaraciones emitidas por Aldo Rico, quien llamativamente a lo largo de su carrera ocupó varios cargos públicos, la CGT rechaza y repudia sin miramientos esta y otras expresiones cuyo único objetivo es erosionar nuestro sistema democrático», indicó la central obrera en un comunicado difundido por Twitter por uno de sus titulares, Héctor Daer.
En el texto, la CGT afirmó que «los mensajes difundidos por este sujeto no son compatibles con un país en el que la democracia es uno de los acuerdos que trasciende cualquier tipo de ideología, pensamiento o partido político» y solicitó a la Justicia que «por lo menos investigue si este tipo de expresiones configuran algún delito».
«Desde la CGT llamamos a la prudencia frente a una situación social en la que los llamados a la violencia o al desorden no colaboran con las soluciones que los trabajadores y trabajadoras necesitamos», concluyó el texto.
A través de un video casero, difundido ayer por redes sociales, Rico hizo una «llamada de reunión antes de las crisis y antes de la batalla, como se estila en nuestras Fuerzas Armadas».
«Camaradas, cuando la Patria está en peligro todo es lícito, menos dejarla desaparecer», sostuvo, y pronosticó que «las circunstancias de violencia se van a profundizar».
En ese contexto, el Cecim de La Plata afirmó en un comunicado que «en estos días preocupantes donde se evidencia una voraz ofensiva de especuladores financieros contra los intereses de la inmensa mayoría del pueblo argentino, aparece la voz del golpista carapintada Aldo Rico lanzando una proclama evocando ser la ‘reserva moral’ convocando a sus ‘camaradas de Malvinas'».
Asimismo, recordó que Rico «protagonizó los alzamientos carapintadas entre 1987 y 1988 condicionando la democracia con las leyes de la impunidad, de obediencia debida y punto final».
«Se hace eco de la oleada desestabilizadora de sus jefes políticos y agita convocando una reunión con los asesinos y torturadores que formaron parte de las FF.AA durante la dictadura cívico-militar, que además participaron de la aventura bélica llevada a cabo en 1982 que tuvo como resultado la muerte de cientos de soldados conscriptos en la Guerra de Malvinas», añadió en el comunicado.
Los excombatientes de La Plata señalaron que «no es novedad que los otrora dictadores y responsables de la mayor desaparición de personas, secuestros de bebés, endeudamiento, torturas a sus soldados en la guerra de Malvinas, digan presente. Son golpistas y asesinos» y manifestaron que «nunca defendieron la soberanía nacional y menos aún la soberanía popular, contrariamente actuaron en consecuencia contra los intereses del pueblo argentino».
En ese marco, repudiaron «las expresiones de los responsables de la derrota de Malvinas, como lo es Aldo Rico y cuanto militar protegido por un Poder Judicial que no actúa en consecuencia ante semejantes manifestaciones antidemocráticas».
A la vez, el Cecim de La Plata solicitó al Ministerio de Defensa de la Nación que «tome todas las medidas del caso para que personas que distan mucho de haberse rozado con el honor, con semejante prontuario sigan manteniendo el grado militar».
Los exsoldados hicieron un llamamiento a «las fuerzas populares, los partidos políticos, las centrales sindicales, los organismos de derechos humanos, las diversas ONG y los Centros de Excombatientes y a todas las expresiones del campo popular para seguir trabajando en unidad por memoria, verdad, justicia, soberanía y paz».
En tanto la CTA-A bonaerense, también repudió en un comunicado las declaraciones de Rico por «golpistas, antidemocráticas y antipueblo» y apunto contra el exmilitar por intentar «instalarse en la escena política instigando a un ataque al gobierno democrático».
«El pueblo argentino hace cuarenta años gritó ¡Nunca más! para terminar con los gobiernos dictatoriales y genocidas y es ese mismo grito el que hoy volvemos a esgrimir todas las organizaciones populares», expresó la organización sindical.
En la misma línea, el secretario de Derechos Humanos de la CTA-A bonaerense, Emiliano Hueravilo, enfatizó: «No vamos a permitir que estos genocidas realicen este tipo de comentarios».
Además, resaltó que desde la CTA-A bonaerense «reafirmamos la democracia», y en consecuencia, «garantizamos los gobiernos constitucionales, pensemos igual o no», para entonces «nunca volver a tener a estos personajes que quieren matar con sangre nuestra democracia.
«Rechazamos los dichos de Rico y de todos los que puedan pensar como él, y apostamos a la democracia, al debate y la organización desde las calles», completó Hueravilo.