Axel Kicillof encabezó la primera reunión de campaña con los intendentes de Unión por la Patria. El cónclave, que se realizó en un salón de eventos del centro de La Plata, sirvió para coordinar las actividades proselitistas en los distritos de las próximas semanas y mostrar una foto de unidad tras el complejo cierre de listas del 24 de junio.
El encuentro comenzó pasado el mediodía. Reunió a los jefes comunales del ex Frente de Todos tanto del Conurbano como del interior y al gabinete bonaerense. El objetivo de la convocatoria era claro: presentar los ejes de la campaña provincial con la que Kicillof buscará su reelección junto a Verónica Magario, unificar el discurso y coordinar la agenda de visitas a los distritos por actividades de gestión, pero también de la campaña.
Kicillof se mostró acompañado por la ministra de Comunicación Pública, Jésica Rey, y por el consultor político Ignacio Ramírez, quien fue el ideólogo de la campaña del Clío que lo llevó a la gobernación en 2019. Ramírez es el director de la carrera de Posgrado de Opinión Pública y Comunicación Política de Flacso y volverá a ser el asesor de campaña del mandatario, ahora con el objetivo puesto en la reelección.
Durante el encuentro, Kicillof y Ramírez detallaron la estrategia electoral que se centrará en poner en valor la gestión provincial y los derechos que se garantizaron para contrastar con el ajuste que promete la oposición en caso de ganar las elecciones. El slogan, que ya es una marca registrada de la administración bonaerense, será «Derecho al futuro». El objetivo es traccionar votos de abajo hacia arriba, es decir, desde los municipios hacia la Provincia y la Nación.
También se habló de unificar el discurso a nivel nacional, provincial y distrital, de reforzar especialmente la campaña y las bajadas al territorio en los municipios donde hoy gobierna Juntos por el Cambio. Como Además, los intendentes se sacaron fotos con Kicillof y Magario para usar de insumo en la campaña a nivel local, tanto para banners como para redes sociales.
A la salida del encuentro, el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, señaló que «se trabajó en ver cómo ordenamos, cómo nos organizamos en cada distrito, y los lineamientos políticos en general, que vamos a ir profundizando seguramente con la presencia del Gobernador y los demás candidatos y candidatas del partido».
Su par de Hurlingham, Juan Zabaleta, sostuvo que se acordó «ir casa por casa, barrio por barrio, trabajar, consolidar todo este camino que hemos transitado, para profundizar derechos, para que haya más inclusión, más oportunidades» y aseguró que «hay mucho para mostrar» en materia de la gestión del Frente de Todos.
El jefe comunal de Exaltación de la Cruz, Diego Nanni, contó que se compartieron «algunos parámetros de campaña para unificar criterios» y consideró que para el oficialismo es un desafío «volver a ilusionar y demostrar que no estamos tan mal como nos quieren hacer creer, sino que se ha hecho muchísimo».
PALOS Y UN PEDIDO A LA OPOSICIÓN
Por la mañana, antes del cónclave, Kicillof inauguró la obra de remodelación y ampliación del Polo Judicial Avellaneda-Lanús, acompañado por el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi; el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis; y los ministros bonaerenses Agustín Simone (Vivienda) y Julio Alak (Justicia).
En este marco, el mandatario reclamó a los legisladores bonaerenses de Juntos por el Cambio que voten los más de 100 pliegos de designación de fiscales, jueces y jueces de paz que envió a la Legislatura, que está paralizada desde hace varios meses. Las designaciones se aprueban con acuerdo del Senado.
«Debatan y voten a los que quieran. Pero lo necesitamos. Por más que sea período electoral, es un ratito, y resolvemos un problema para quienes lo necesitan», planteó el gobernador y se refirió así al parate en que se encuentra la Legislatura. La última sesión fue convocada para el 15 de junio pero se cayó por falta de quórum de la oposición.
También cuestionó duro a los precandidatos de Juntos por el Cambio y aseguró que «compiten a ver quién dice la barbaridad más grande en términos de derechos que van a restringir o quitar» si llegan ganar las elecciones.
«Hay una suerte de discusión entre los postulantes opositores a ver quién es más descarnado cuando plantea ajustar, achicar, privatizar, echar empleados», consideró en declaraciones a AM 990 y destacó que «hablan de dinamitar o de obra pública cero, pero la sociedad sabe que no necesita menos presencia del Estado sino más».
“Los postulantes opositores discuten quién es más descarnado para ajustar“
En ese marco, puso de relieve que «una de las candidatas de la derecha dice que van a echar empleados públicos de todos los ministerios en igual proporción, lo que significa menos maestros y menos auxiliares, menos médicos y enfermeros, o menos policías», al tiempo que evaluó que «es una ventaja» que la derecha diga cómo piensan gobernar y lo contrastó con el plan que Unión por la Patria tiene para seguir ampliando derechos en materia de educación, salud, vivienda y obra pública.
