Axel Kicillof eligió el 17 de octubre para romper el silencio sobre la interna peronista, en medio de las presiones de los últimos días, pero fue más allá y se calzó por primera vez el traje de candidato presidencial. Habló como el líder de un proyecto político con impronta bonaerense en condiciones de enfrentar al presidente Javier Milei.
«Tenemos que ser alternativa: este proyecto político le va a poner el año que viene un freno a Milei en la urna», sentenció el gobernador, casi en el final de su discurso, en el acto organizado por el Día de la Lealtad, en el kilómetro cero del peronismo. Y sacó chapa de los diplomas que le dejó la elección en 2023 en la que fue reelecto por más de 20 puntos: «Cuando los invada la tristeza o sientan que no hay futuro, recuerden que acá le ganamos tres veces a Milei».
Habló de construir «una esperanza colectiva» desde la Provincia y mostró que su gestión ya viene generando ese proyecto desde 2019 con el respaldo de los sindicatos y los movimientos sociales.»Fuimos capaces entre todos con una fuerza política, porque acá nada se hace solo, de hacerlo con los bonaerenses. ¿Por qué no podemos hacerlo, cuando estemos listos y organizados, con casi 50 millones de argentinos?», se preguntó. La multitud le respondió con el canto de «Axel Presidente», a lo que retrucó: «Falta mucho y no es momento de candidaturas».
Luego sinceró su opinión sobre el proceso que atraviesa el peronismo. Dijo que está en un momento de reflexión y debate tras la derrota del año pasado y pidió «no dramatizar» antes de llamar a la unidad y parafrasear la carta de la expresidenta Cristina Kirchner: «Acá no sobra nadie».
Hubo un fuerte llamado a la unidad y también una reivindicación de los gobiernos de CFK, en medio de la pulseada abierta por la candidatura del PJ nacional y el silencio de los últimos días, pese a las presiones de La Cámpora para que la apoye públicamente. «Mi opinión sobre las cosas que se estuvieron discutiendo en los últimos días es sencilla: unidad, unidad, unidad».
Presencias y ausencias
El acto en el «kilómetro 0» del peronismo reunió a más de 50 mil personas que desbordaron las cuadras aledañas a la avenida Montevideo y Nueva York, donde se montó el escenario. Apenas comenzó su discurso, Kicillof celebró la convocatoria en un día tan importante para la historia del peronismo. «Festejamos estar juntos en la pelea que estamos dando, la certeza y la convicción de que este desastre de (Javier) Milei no dura para siempre», dijo, arrancando con un discurso de aliento a la militancia.
En el escenario, Kicillof se mostró respaldado por los dirigentes que hace tiempo vienen alentando el armado del «kicillofismo» y que ven en él «la esperanza» del peronismo para volver a ganar en 2027. Ministros, intendentes, legisladores, el triunvirato de la CGT, las dos CTA, todo el arco sindical bonaerense y movimientos sociales dijeron presente.
A su lado estuvieron la vicegobernadora Verónica Magario, los ministros Carlos Bianco (Gobierno), Andrés Larroque (Desarrollo), Cristina Álvarez Rodríguez (Jefa de Asesores), Walter Correa (Trabajo) y los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mario Secco (Ensenada), Julio Alak (la Plata) y Fabián Cagliardi (Berisso).
También estuvieron Juan José Mussi (Berazategui), Gustavo Barrera (Villa Gesell), Gastón Granados (Ezeiza), Federico Achaval (Pilar), Fernando Espinoza (La Matanza), Lucas Ghi (Morón), Mariano Cascallares (Almirante Brown) y Rodrigo Aristimuño (Coronel Rosales), entre otros. La comitiva «intendentista» llegó en combi y encabezada por el ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis.
Hubo también una fuerte presencia gremial. Estuvieron Pablo Moyano, Héctor Daer, Carlos Acuña y Julio Piumato. También Hugo Yasky y Roberto Baradel, además de toda la dirigencia sindical bonaerense.
Los ausentes con aviso fueron La Cámpora y el Frente Renovador. Los ministros que forman parte del gabinete y militan en las filas de la agrupación que conduce Máximo Kirchner, como Nicolás Kreplak (Salud), Juan Martín Mena (Justicia), Daniela Vilar (Ambiente) y Florencia Saintout (Instituto Cultural) pegaron el faltazo. Tampoco asistió el único massista del equipo del Gobernador: Jorge D´Onofrio.