El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, la pasaron mal en San Luis. En una recorrida de campaña, los precandidatos a presidente y vice por Juntos por el Cambio tuvieron que finalizar actos de manera anticipada. Tanto en Villa Mercedes como en San Francisco del Monte de Oro, Morales fue insultado por manifestantes que llevaban banderas wiphala, carteles que pedían la liberación de presos, y cantaban «Morales, basura, vos sos la dictadura«.

En tanto, el Concejo Deliberante de la ciudad de San Luis emitió una declaración de repudio «por el abuso del uso de las fuerzas de seguridad llevada a cabo en la provincia de Jujuy por el gobernador Gerardo Morales contra manifestantes que se expresan en contra de las reformas de la Constitución provincial, atentando contra los principios fundamentales de derechos humanos y la Democracia».

Sin embargo, Morales redobló la apuesta al protagonizar un spot de campaña en el cual advierte que no dará «ni medio paso atrás». En el corto, Morales insistió con endilgar responsabilidades a Milagro Sala (presa desde 2016), aseguró que «esa es la primera de tres cosas que el gobierno de Fernández y Fernández no me perdonan» y señaló que «los últimos cuatro años» el presidente Alberto Fernández, cada vez que lo vio, le «pidió que indultara a Milagro Sala».

En ese marco, el postulante vicepresidencial remarcó la idea de un «intento de Golpe de Estado», referido a las presentaciones hacia la nulidad de la reforma constitucional y la intervención de la provincia. «No se lo vamos a permitir», sentenció el caudillo jujeño, para luego señalar la presencia de «personas extrañas» que vinieron «a generar hechos de violencia» y que luego «mintieron y movilizaron a las comunidades indígenas».