La CGT quedó fortalecida de cara al proceso de reestructuración del peronismo con miras a las próximas elecciones presidenciales. Desde la CGT aseguran que los “procesos se pueden acelerar” y por eso, una vez lanzado formalmente el paro general para el próximo 25 de septiembre, se reunieron con un decena de gobernadores peronistas.
Desde la cúpula de la central obrera impulsan la rápida construcción de una alternativa política con vocación de poder de cara al próximo proceso electoral. Las conversaciones no empezaron esta semana. De un tiempo a esta parte la frecuencia de las conversaciones entre algunos dirigentes sindicales y dos de los gobernadores peronistas con más experiencia han aumentado la frecuencia.
El triunvirato reivindica su posición a los largo del gobierno de Mauricio Macri y ve ese “frágil equilibrio entre la confrontación y el dialogo” uno de los bastiones que lo hizo ganarle, por lo menos por ahora, la pulseada a Moyano.
En ese marco ven la medida de fuerza anunciada para fines de septiembre como un aporte a intentar canalizar el malestar de la gente por las vías democráticas.
Por su parte, los movimientos sociales también reconocieron el triunfo simbólico del triunvirato, y pese a compartir la multisectorial 21F# con Camioneros y la dos CTA, fueron uno de los primeros actores políticos en adherir a la medida convocada por la CGT y anunciaron que en ese marco movilizarán en todas las rutas del país.
La adhesión para los movimientos sociales se da en el marco de un plan de lucha que llevarán adelante durante todo septiembre bajo el lema “Fuera FMI. Basta de hambre” y que comenzará el 6 de septiembre con una movilización a la ANSES para pedir aumento de emergencia para la AUH y las jubilaciones y pensiones mínimas.
En tanto, puertas adentro de la CGT el análisis es sencillo. La sociedad va a volver acompañar el paro general porque las condiciones económicas y sociales se siguen deteriorando. En tanto que desde lo político ven a un gobierno debilitado y a una oposición aun fragmentada. Por eso el Triunvirato se siente fortalecido y junto a otros actores comienza a jugar en torno a los gobernadores.