El colapso del sistema de salud en la Ciudad de Buenos Aires “ya no se va a dar”. Así lo aseguró el titular de la cartera sanitaria porteña, Fernán Quirós. Los números que distribuye su Ministerio muestran un descenso sostenido de casos de residentes en las últimas tres semanas. Ayer solo un 51,3% de las camas del sector público destinadas a pacientes graves con Covid estaban ocupadas, un 36% de las separadas para casos moderados y un 19,6% de las asignadas a situaciones leves.
Por eso también se decidió “refuncionalizar” camas Covid para que sean usadas por otros pacientes. “Básicamente, lo podemos hacer porque estamos con una ocupación a la baja.Y lo tenemos que hacer también porque al avanzar con el desandado de la cuarentena en la Ciudad también aumentaron los politraumatismos, los ACV, los infartos, etc”, explican a Tiempo desde el Ministerio de Salud porteño. El escenario, agregan, también les permitió dar licencia de una semana a unos 1600 trabajadores de salud del sector público.
“En la medida en que baje la demanda de camas para Covid es lógico que se refuncionalicen, porque hay una cantidad de patologías que han quedado postergadas”, razona el infectólogo Pedro Cahn. “Los hospitales públicos tienen flexibilidad como para tomar esas decisiones y corregirlas en caso de ser necesario”, agrega Eduardo López, otro de los infectólogos del grupo de expertos que asesoran al presidente Alberto Fernández.
“Es bueno si en el sector público pueden reasignar camas y dar licencias. Yo trabajo en un hospital privado y la verdad es que no puedo prescindir de ningún médico”, explica Arnaldo Dubin, de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva. “Estoy desesperado por darle vacaciones a mi gente, porque están agotados. No dan más. Pero lo cierto es que, por lo que recibimos en el hospital, seguimos en el peor momento”.