El campeón de la Superliga jugará contra el campeón de la Copa de la Superliga una final en Qatar. Puede parecer de ciencia ficción. Pero son los planes que tiene la Superliga para el año próximo. La idea es imitar lo que ocurre en Europa. En Francia, el Trophée des Champions lleva diez años jugándose fuera del país: pasó por Montreal, Tánger, Nueva York y Beijing, entre otras ciudades. La Supercopa de Italia ya jugó en Qatar sus ediciones de 2014 y de 2016. Y la Supercopa de España tendrá esta tarde su primera edición en tierra extranjera: a las 17, Barcelona y Sevilla jugarán en Marruecos.
Qatar será el anfitrión del próximo Mundial, en 2022. Y eso hace que sus inversiones millonarias se expandan en el mundo de la pelota. En la Argentina, el facilitador de los vínculos con el emir Tamim bin Hamad Al Thani se llama Gastón Gaudio. El campeón de Roland Garros construyó una amistad personal con el emir. Son de la misma generación y se hicieron amigos jugando al tenis en Miami. Gaudio acercó al emir a Mauricio Macri y también a Boca, que a partir de esta temporada lleva la marca de la aerolínea estatal de Qatar en su camiseta.
Ahora también la Superliga busca vincularse con él. «Gastón destraba cualquier relación. Lo saluda por el cumpleaños, come asado con él. Nadie llega al emir. Nos gustaría aprovechar esa situación», cuenta un miembro del Comité Ejecutivo de la Superliga. Como en Primera División hay 26 equipos, el fixture del campeonato que arrancó este viernes tiene 25 fechas. Termina en abril. La idea es estirar la temporada hasta julio. Ese segmento ocupará la Copa de la Superliga, con un formato similar al que tiene en Inglaterra: la jugarán los equipos de Primera en cruces directos que se determinarán según la posición en que terminen. Aún resta el arreglo con los dueños de los derechos de televisación -Fox y Turner- para que se oficialice.
La idea es que ambos campeones luego se crucen en un partido único. Y ahí es donde aparece Qatar, que también fue invitado por la Conmebol a participar de la próxima Copa América, que se jugará en 2019 en Brasil. «Hubo una charla, pero no con ellos directamente. Sabemos que para promover el fútbol y alimentar el próximo Mundial quieren hacer un partido oficial, de calidad. Se pensó que el partido entre el campeón de la Superliga y el de la Copa lo podríamos ir a jugar allá si nos ponen una fortuna. Es algo que está de moda», confirma la fuente de la Superliga. Por las altas temperaturas, al igual que ocurrirá en 2022 con el Mundial, el partido deberá jugarse entre noviembre y febrero.
Los capitales árabes no aparecen sólo para comprar localías. En enero de este año la Liga de España firmó un acuerdo para que siete equipos incorporaran nueve jugadores de Arabia Saudita. «En el fútbol hay mucho romanticismo, lo entiendo. Pero hay que generar ingresos para los clubes», explicó Javier Tebas, presidente de la Liga y gurú del gobierno nacional que ayudó a parir la Superliga. Sólo dos jugadores tuvieron su chance: sumaron 59 minutos.