«Facebook me dio la posibilidad de hablar directamente con la gente, de estar cerca de ellos y mostrarme tal cual soy. Fue la llave de acceso a las casas (reales y virtuales) de muchísimas personas de todo el país», destaca el presidente Mauricio Macri en el sitio promocional de «Facebook para empresas», una de las áreas de negocios más jugosas que tiene la plataforma creada por Mark Zuckerberg para rentabilizar la enorme audiencia cosechada en el mundo. Allí la red social que cuenta con 31 millones de usuarios en Argentina destaca que desde 2012 el empresario la eligió como la «plataforma principal para la campaña Mauricio Presidente» y se ufana presentando los resultados con el título: «Camino a la Casa Rosada de la mano de Facebook».
Si bien la afirmación parece excesiva, es claro que el jefe de Estado reconoció el enorme apoyo que hizo Facebook a su campaña. Apenas llegó al sillón de Rivadavia se reunió en Davos con la responsable de operaciones de la compañía, Sheryl Sandberg. Poco después anunció que el Ministerio de Modernización usaría esa plataforma para comunicación interna. El escándalo que se generó por el manejo de datos personales que tiene esa cartera lo hizo recular. Pero en ningún momento perdió de vista la eficiencia que le atribuyó en su campaña política.
De ahí que en sus primeros 30 meses de gestión haya destinado más de 99 millones de pesos del erario público para informar por esa vía sobre actos de su gobierno, tal como se desprende de los informes semestrales de pauta oficial que publica la Jefatura de Gabinete de Ministros (JGM). Pero Macri también quedó vinculado en el escándalo de Cambridge Analytica, la empresa que se jacta de haber modificado resultados electorales en todo el mundo valiéndose de información de millones de usuarios de Facebook. Y quien lo vinculó es el propio director de la compañía de «estrategia digital», Alexander Nix.
Bendita red tú eres
En lo que va del año Cambiemos lleva invertidos al menos $ 28.285.422,69 en pauta oficial en redes sociales, según los datos del último informe de la JGM publicado esta semana. Lo curioso dentro de un semestre donde la inversión global en comunicación pública fue bajo comparado con años anteriores, es que 16,2 millones (el 57% de lo destinado al rubro) se gastó sólo entre mayo y junio. Curiosamente cuando se disparó el dólar, la crisis se profundizó y Cambiemos decidió recurrir al FMI.
Otro elemento a considerar es que de lo invertido en redes, el 97,4% se repartió entre Facebook y Google. Unos 15,5 millones fueron para promocionar información en las plataformas de Zuckerberg (el 54, 65%), mientras que unos 12 millones fueron para las que fundaron Sergei Bin y Larry Page (42,76%).
Si bien Facebook fue la red que se quedó con mayor pauta individualmente (12 millones), Instagram (del mismo dueño) fue la que experimentó el mayor crecimiento. A junio de 2018 el gobierno ya lleva invertidos 2,2 millones en la red favorita de los adolescentes y jóvenes, lo que representa tres veces y media más de lo que había gastado en esa plataforma durante el primer semestre de 2017. Lo curioso también es que el 54% del dinero para Instagram se destinó a «historias», mensajes efímeros que sólo están disponibles durante 24 horas.