La realidad es que finalmente la Argentina escuchó el mensaje; un mensaje que decía que a nosotros nos importa la educación pública, y que las escuelas tienen que estar de pie; un mensaje que decía que a nosotros nos interesa la universidad pública, sembrando universidades por todo el país para que en cualquier rincón de la Patria los chicos puedan interesar; un mensaje que decía que las pequeñas y medianas empresas, que invierten y dan trabajo, deben ser cuidadas, atendidas y respaldadas desde el Estado; un mensaje que decía que nosotros nunca creímos que la mejor forma de progresar era sacándole derechos a los que trabajan, y le dijimos que no a la reforma laboral; un mensaje que decía que definitivamente nuestros abuelos tienen derecho a tener salud y un ingreso como el que corresponde, y que vamos a pagarlo antes de seguir regalándole a los bancos intereses que no deben ir allí, sino que deben ir al progreso de nuestros jubilados.
Todo eso entendió la Argentina. En Juan (Manzur) va mi agradecimiento a todos los gobernadores que hicieron posible este resultado. Ellos, como sus pueblos, entendieron que en la Argentina vamos a construir un país distinto, donde el sistema federal funcione, donde todos tengan la posibilidad de crecer y desarrollarse en el mismo lugar donde nacieron. En estos cuatro años la Argentina va tener un gobierno en el que gobiernen 24 gobernadores con un presidente. Y lo vamos a hacer porque la Argentina merece un país integrado, no un país segregado donde algunos disfrutan y muchos padecen. Y esto seguro que el país que construyamos así va a ser mejor. Para que las argentinas y argentinos pacifiquen sus espíritus. En esa Argentina todos tienen lugar.
La Argentina es un país donde a partir de hoy se acabó el concepto de venganza y de grieta. Argentina dio un veredicto claro, que dice cambiemos. Argentina se dio cuenta que el cambio éramos nosotros, no ellos. Haremos todo lo posible para que los argentinos pacifiquen sus espíritus. No preguntemos por quién voto, sino si sueñan con ese país que nosotros soñamos. Abracémoslos. Vamos a empezar una etapa nueva. Los que estamos intranquilos, que no se intranquilicen. Nunca fuimos locos gobernando, una vez más vamos a arreglar los problemas que otros generaron. Lo dijo muy bien Máximo, no venimos a derrotar un regimen, sino a crear una nueva Argentina. Que termine con este tiempo de mentiras y dé un horizonte mejor a los argentinos. A los que les recomendaron que se fueran a dormir, que son se duerman, porque durmieron mucho tiempo y nos generaron un problema enorme. La Argentina hoy esta pariendo otro país, y en ese país, que es del que hablaba Cristina días atrás en Rosario, el único trabajo que tenemos Cristina y yo, Axel, Sergio, Máximo, Verónica y cada gobernador, es que los argentinos recuperen la felicidad que han perdido.
Gracias compañeros, gracias compañeras, los abrazo desde el alma.