“Que se venga a vivir a Rosario”, interpeló el intendente Pablo Javkin al ministro de Seguridad de Santa Fe, Rubén Rimoldi. «Vivo en Rosario», le contestó el funcionario. Horas antes había ocurrido un nuevo episodio violento, intimidatorio, en un lugar público.
Este miércoles por la mañana empleados del centro de salud del Distrito Sudoeste llegaron a sus puestos de trabajo y se encontraron con que el edificio había sido baleado. Al menos siete disparos de arma de fuego dejaron su marca en ventanas y fachada.
El Ciudadano de Rosario relata que los agresores dejaron, como ya es costumbre en la ciudad, un texto escrito a mano en un cartón. Esta vez con alusión a René Ungaro y Esteban Alvarado, dos líderes de bandas condenados y detenidos por narcotráfico. Ambos están mencionados por sus nombres de pila. “Dejen de mandar cartita y pasar datos a los fiscales”, reza la amenaza, sin firma.
El escrito fue aportado por un vecino, que se lo entregó a la Policía, que no lo había visto (luego apuntaron que el papel apareció más tarde). El enojo estalló en boca de la fiscal de la Unidad de Balaceras Valeria Haurigot, quien en conferencia de prensa se refirió al accionar de los auxiliares de justicia: “En nuestro trabajo tenemos también que revisar cómo se desarrolló el operativo posterior a la balacera. Tenemos que ver qué pasó. Notamos una desprolijidad en cómo se manejó la escena del hecho. Nos deja muy preocupados, es un retroceso en cómo se preserva lo que a nosotros nos va a servir. En el atentado contra Canal 3, a partir de una huella dactilar pudimos esclarecer la autoría material. Es gravísimo lo que pasó”.
Los balazos también impactaron contra el centro de salud Santa Teresita, que funciona al lado del CMD Emilia Bertolé. En el lugar, ubicado en avenida Francia al 4400, trabajó personal de la Agencia de Investigación Criminal.
Como consecuencia del ataque, se suspendió la atención al público y la aplicación de vacunas bivalentes contra el covid, que iba a comenzar en la jornada.
Solo se trata de vivir (en Rosario)
Luego de una nueva balacera contra dependencias municipales, el intendente de Rosario Pablo Javkin volvió a criticar el escaso despliegue de la policía provincial en la ciudad y reclamó que el ministro de Seguridad de Santa Fe, Rubén Rimoldi “se venga a vivir a Rosario”.
“A mí no me van a balear una oficina municipal y voy a andar anunciando una bicisenda, me perdonan”, afirmó el intendente tras suspender un acto oficial que tenía previsto para la mañana de este miércoles, luego de conocido el ataque contra el Centro de Salud del Distrito Sudoeste, que incluyó mensaje mafioso contra dos detenidos por narcotráfico.
Además, se preguntó y respondió, “¿Dónde está la Policía? No es que dude, no están”.
El aludido se reunió este mismo miércoles en la sede de Gobierno provincial frente a Plaza San Martín con todos los jefes seccionales de Rosario y luego, en conferencia de prensa, le respondió al jefe del Palacio de los Leones por esa vía. “Yo vivo en Rosario”, contestó el titular de la cartera presionada por los altos índices de violencia, y por las dudas acotó: “Tengo muy buena relación con él”.
Rimoldi destacó que el gobernador Omar Perotti destinó 700 nuevos uniformados para la ciudad de Rosario que están desplegados en todo el ámbito central de la ciudad. “Cada uno de los empleados que está en la calle tiene su chaleco de protección balística”, agregó como dato.
También sostuvo que en todos los destacamentos de los Distritos debía haber un policía más un móvil, tal como indica el convenio firmado entre Provincia y Municipalidad. “Nosotros estamos realizando con el jefe de policía de Rosario un sumario administrativo para ver las responsabilidades de los policías que no concurrieron. Si es un turno de 24 horas, debía haber como mínimo seis efectivos para esa guardia”, discriminó culpas.
Con respecto al cartel dejado en el centro de salud, que fue encontrado por un vecino luego de la actuación de los peritos policiales, Rimoldi recordó que incluye nombres de personas privadas de la libertad y argumentó que eso habla bien de lo actuado por su Ministerio. “Estamos molestando a personas y mafias que de esta manera nos están demostrando el gran trabajo de la policía”. Y agregó: “Le digo a la ciudadanía que tenemos que seguir por este camino”.
Rimoldi contó que habló con el presidente Alberto Fernández y remarcó como «efectivo» el trabajo conjunto de las fuerzas de seguridad provinciales y federales.
Por último, se refirió a la muerte de Jimi, el músico secuestrado y ultimado en la puerta de la cancha de Newell’s como una suerte de instrumento elegido al azar para cursar una amenaza mafiosa. “Se utilizó en otros lugares como en Colombia esta metodología”, afirmó. Pero aclaró que no es pertinente comparar a Rosario con el país caribeño asolado por los carteles de narcotráfico.
Convenio en veremos
El pasado 1 de diciembre, el gobernador de la provincia, Omar Perotti, y el intendente Javkin firmaron un convenio para la puesta en marcha de tres Centros Operativos Policiales (COP) en Rosario, con el objetivo de brindar a la ciudadanía una atención integral en seguridad, que contenga distintos servicios y áreas.
“¿No reaccionan en un edificio que están ellos?”, criticó sobre la policía el jefe del Palacio de los Leones, quien volvió a criticar el accionar de los uniformados. Se refirió en eso a la balacera de la comisaría 32ª. “¿Cómo puede ser que ven que balean en bicicleta y nadie los persigue?”, arremetió en torno a un problema cuya responsabilidad viene adjudicando a las administraciones de Santa Fe y Nación.