Dispararon a los trabajadores del INTI cuando intentaban realizar una asamblea

Los trabajadores del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) convocaron a una asamblea dentro del Parque Tecnológico Migueletes este lunes por la mañana. Cuando los delegados de la Junta Interna del INTI ingresaban al predio junto a mineros de Río Turbio, invitados a esta actividad, recibieron insultos y agresiones físicas de parte de integrantes de la seguridad. Un efectivo de la Policía Federal intervino disparando su arma reglamentaria.

No hubo ningún herido pero aumenta la gravedad de lo sucedido que muy cerca de allí se encuentra un jardín maternal.

Según los trabajadores, la provocación fue iniciada por el jefe de portería, José Provetina, al que se le sumó personal de Murata, la empresa de seguridad. Los mineros trataron de defender a los delegados de INTI de la violenta situación y de inmediato, intervino el agente policial.

Los mineros de Río Turbio habían llegado un día antes para participar de la asamblea donde se definiría su aporte en el acampe frente al Congreso de la Nación convocado por CTA Autónoma y ATE Nacional, para esta semana. “Siempre se han mostrado solidarios con nosotros”, dijo Giselle Santana, delegada de ATE-INTI. 

El  Parque Tecnológico Migueletes se encuentra militarizado desde hacer 8 meses, cuando despidieron a 258 trabajadores. No es la primera vez que suceden episodios como el de este lunes. Desde entonces es usual que haya malos tratos y que se obstaculice la lucha por la reincorporación del personal despedido.

Pero a pesar de lo sucedido, se logró realizar la asamblea. Los trabajadores decidieron democráticamente  unirse a la protesta en contra del presupuesto de ajuste del presidente Mauricio Macri y del FMI. Manifestaron su repudio al “accionar criminal de la Policía Federal y el personal de seguridad del INTI”. Así también responsabilizaron al presidente del INTI, Javier Ibáñez; al Gerente de Recursos Humanos, Ernesto Luna, y a la Ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, por “poner en riesgo la integridad física de los trabajadores”.