Asuntos Internos y la justicia le dieron la estocada final a una banda de policías de Hurlingham sospechada de ofrecer cobertura a piratas del asfalto que operaban en la zona. En la noche del jueves, siete integrantes de la fuerza, incluido un comisario, cayeron detenidos por haber liberado a tres delincuentes a cambio de medio millón de pesos.
La investigación había comenzado en abril de 2015, cuando 12 sospechosos fueron detenidos en Villa Tesei, tras robar dos contenedores del puerto de Buenos Aires con amasadoras de pan. Pero cuando La Bonaerense pasó el dato a la UFI 9 de Morón omitió mencionar a tres de los presos, porque ya los habían liberado a cambio de un suculento botín, según testimonió una agente que se negó a ser parte de la maniobra.
Esta testigo protegida denunció haber sido presionada por sus jefes y colegas de armas para que borrara los rastros de los tres detenidos que se fueron caminando de la seccional.
Los investigadores intervinieron las comunicaciones telefónicas de los implicados, sobre todo de quienes habrían ideado la maniobra: el ex comisario de Villa Tesei, Ángel Cardozo; el jefe de calle Guillermo Aybar; y el inspector Ariel Benítez. Los tres fueron detenidos en el procedimiento que arrancó el jueves y se extendió hasta las 4 del viernes. Quedaron acusados de encubrimiento agravado y cohecho.
«La investigación llevó más de un año. Hubo que reforzar todos los dichos de la testigo. Al principio teníamos sólo su declaración y la grabación de una amenaza que le había propinado Aybar», explicó la fiscal del caso Claudia Fernández a Tiempo y aclaró que las pericias de voz determinaron la responsabilidad del jefe de calle, por lo que también fue imputado por amenazas.
En la casa del comisario Cardozo fueron encontradas tres armas, mientras que en la de Benítez había otra pistola. Como todas estaban sin registrar o con pedido de secuestro, los investigadores suponen que podían ser posibles «perritos» utilizados para plantar falsas pruebas en procedimientos.
Movilizada por el valor que tuvo la testigo protegida, la fiscal expresó: «Realizar este procedimiento esta semana, donde se conmemora el #NiUnaMenos, es un orgullo para mí. A esta policía hay que darle una medalla porque se enfrentó a la mafia de sus propios compañeros, gente armada acostumbrada a moverse con total impunidad.»
«No pensaba encontrar dijo sorprendida Fernández que en la comisaría todavía figuraba en el libro de entradas de detenidos los tres perejiles consumidores de drogas que habían salido a cazar para reemplazar la vacante que habían dejado los tres piratas liberados.» «