El índice de septiembre dio 2%, la cifra más baja de los últimos cuatro años. Fuerte descalce entre la evolución de los precios al por mayor y los minoristas.
La cifra es la más baja de los últimos cuatro años, desde mayo de 2020. Obviamente el gobierno festejó ese dato en las redes sociales. “Mal día para los mandriles”, tuiteó el presidente Javier Milei con la galantería que lo caracteriza. El ministro de Economía, Luis Caputo, se limitó a poner una serie de banderitas argentinas a modo de festejo en su cuenta de la red social X.
El dato era esperado con expectativa en el mercado porque se trataba de desentrañar cuál había sido el efecto de una de las balas de plata que usó el gobierno: la baja de la alícuota en el impuesto PAIS a las importaciones, que retrocedió al 7,5% luego de que el propio Caputo, en una de sus primeras decisiones como ministro, la incrementara en 10 puntos.
La medida funcionó: los bienes importados bajaron 1,4% respecto de los precios de agosto. Sin embargo, como apenas inciden en 7 por ciento en la canasta total que mide el Indec, su efecto en el índice final fue una reducción de apenas 0,11 puntos porcentuales.
En tanto, los productos nacionales subieron en un promedio de 2,3 por ciento. Entre los que más se movieron figuran las divisiones correspondientes a Impresiones y reproducción de grabaciones (6,5%), Tabaco (5,8%), Petróleo crudo y gas (4,6%) y Productos refinados del petróleo (4,6%). La energía eléctrica, en tanto, subió 4,2%.
Si los precios mayoristas predicen con uno o dos meses de anticipación el comportamiento de los minoristas, ya que constituyen la escala previa del proceso de producción de bienes, entonces podría estimarse que el índice de precios al consumidor seguirá bajando en octubre.
Sin embargo, el pronunciado descalce entre ambos llama la atención: en lo que va del año, el IPC subió 101,6%, unos 40 puntos porcentuales más que los mayoristas. La diferencia es que el primero incluye una gama más variada de servicios, como alquileres, transporte, comunicaciones, salud y educación, que vienen motorizando la inflación en los últimos meses.
En paralelo, el Indec publicó este jueves el índice del costo de la construcción en el Gran Buenos Aires, que arrojó una suba de 4,9% en septiembre de 2024. Este resultado surge como consecuencia de un alza de 1,7% en el capítulo Materiales, de 8,2% en Mano de obra (influido por la paritaria pactada por la UOCRA con las cámaras del sector) y de 5,8% en el capítulo Gastos generales.
De esa manera, el índice muestra una variación de 72,7% en lo que va del año y 169,6% interanual.
Entre los insumos que más se incrementaron durante el último mes se encuentran los Muebles de madera para cocina (9,8%), los Equipos contra incendios (4,5%) y Maderas en bruto y para pisos y techos (4,2%).
En cuanto a los servicios, las alzas más pronunciadas fueron para el alquiler de Contenedor tipo volquete (10,8%) y Camión volcador (8,9%).
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