El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) realizó un relevamiento sobre los impactos de la pandemia del coronavirus en la estructura productiva y en el empleo, en distintos países de América, Europa y Oceanía.
Sobre Argentina, el informe destaca que cerraron las plantas de Axalta y BAFS, los 1.700 despidos en Latam y las 715 mil suspensiones del sector privado.
En Sudamérica, resaltan los 1.2 millones de despidos en el sector comercial de Brasil y la quiebra de 100 mil pequeñas empresas en Bolivia. Además, en Colombia la desocupación en Colombia aumentó del 10,4 a 21,2%, mientras que en Perú pasó de 6,7 a 13,1%. En Uruguay, en tanto, perdieron el trabajo 11 mil personas.
En el norte del continente americano, la crisis tuvo efectos más duros. En Canadá, el desempleo pasó del 5,3 al 13,7%. En México, hubo 500 mil despidos y sobresalen el cierre de la petrolera Halliburton y las quiebras de la banca Famsa y del Grupo Aeroméxico.
En Estados Unidos, hay 25 millones de puestos de trabajo menos. Disney despidió a 100 mil trabajadores, American Airlines redujo la planta en un 30%, Hertz fue a la quiebra y echó a 20 mil personas. Penney y Dean Foods también quebraron, mientras que cerraron plantas de Victoria’s Secret.
En Europa, varios gigantes aéreos se fueron a pique. La francesa Air France despidió a 7.500 empleados y la española Airbus, a 900; la irlandesa Ryanair redujo salarios en un 20%, la portuguesa Tap fue estatizada y Estado holandés rescató a KLM, mientras que la italiana Alitalia, la alemana Lufthansa, la noruega Norwegian y la británica Flybe fueron a la quiebra. Además, en España 5 empresas produjeron más de 175 mil suspensiones. En tanto, en Francia hubo reducciones salariales en 2.2 millones de empleos. Finalmente, en Alemania hubo 300 mil despidos.
En Oceanía, Australia vio caer 700 mil puestos de trabajo vía despidos. La aerolínea Virgin Australia fue a la quiebra y Quantas echó a 6 mil trabajadores. En Nueva Zelanda, por su parte, Air New Zealand recortó 3.500 puestos de trabajo, mientras que el país vio caer el PBI en 1,6%.
El informe aclara que “los datos de cada país no son comparables temporalmente”, al tiempo que “reflejan el impacto del avance del Covid-19 –con velocidad e intensidad diferentes- en las estructuras productivas y laborales”.