Esta vez TikTok le jugó en contra a Javier Milei. El jueves por la tarde, el jefe de prensa de Ituzaingó, Ignacio Etchart, se encontró con una entrevista de octubre de 2022 en la que el candidato libertario proponía un modelo privatizador de Sociedades Anónimas Deportivas para el fútbol argentino.
«A mí me gusta el modelo inglés, de sociedades anónimas. No les va mal eh, tienen un espectáculo bárbaro», le dijo el entonces futuro candidato a presidente por la Libertad Avanza a su entrevistador, Alejandro Fantino, quien le respondió «Javi, nos vamos a pelear ahí».
Comparado con otras frases de Milei –sobre Derechos Humanos, comercialización de bebés, dolarización, venta de órganos, uso de armas y tantos ejemplos más–, no dejaba de ser un asunto menor, casi una inocentada, una anécdota. Pero nunca subestimes a un hincha cuando siente que su club está en peligro.
A veces las campañas más efectivas comienzan en pequeños hechos y Etchart cortó aquel video de más de un año de antigüedad y lo compartió en su cuenta de Twitter: en pocas horas acumuló 700.000 visualizaciones, replicado también por el grupo de Whatsapp que otro hincha de Ituzaingó, Pascual Callichio, había creado ese mismo día, el jueves por la mañana, llamado «Hinchas del ascenso y Clubes de Barrio dicen NO a Milei». Los flyers aportados por una hincha de Comunicaciones también fueron clave para masificar el reclamo.
De hecho, Etchart se había topado con ese video de Milei –en el que le cuestionaba a Fantino «¿quién financia los clubes de barrio?»– en ese grupo hasta entonces minúsculo, con cinco integrantes. Faltaba poco para que el fútbol argentino se pronunciara en contra de un candidato, como nunca antes, en la previa a unas elecciones presidenciales.
Como en un continuado, a las pocas horas, el viernes por la mañana, el periodista Ernesto Cherquis Bialo utilizó su columna de Radio 10 para arengar a los clubes afiliados a la AFA a dejar atrás la «tibieza pusilánime de los dirigentes del fútbol argentino» y manifestar su apoyo a Sergio Massa, «un hombre del riñón del fútbol».
La proclama, el «díganlo ahora, no esperan al lunes (posterior al sufragio)», también se viralizó: Cherquis dejaba en claro que se trataba de una elección trascendental también para el futuro de los clubes. Más allá de su entrevista con Fantino, Milei ya había dado varias señales de su interés por autorizar a las sociedades anónimas deportivas, un viejo sueño de su nuevo socio político, Mauricio Macri. «Una posible dolarización sinceraría el mercado salarial de los técnicos y jugadores», publicó en septiembre Guillermo Tofoni, el empresario elegido por Milei para el fútbol.
La historia también se escribe con paradojas. Cherquis Bialo no es, justamente, un hombre cercano a la actual dirigencia de la AFA. Más bien es crítico. Pero uno de los dirigentes que tomó su pregón fue Pablo Toviggino, vicepresidente de la AFA, encargado del Consejo Federal y nexo entre el fútbol y Massa.
Si Claudio Tapia ya había mostrado su apoyo por el candidato de Unión por la Patria en octubre pasado, cuando Argentina recibió un partido del Mundial 2030, Toviggino lanzó otra arenga vía Twitter el viernes por la tarde. Junto al video de Cherquis Bialo, escribió: «Es la hora de mostrar públicamente el apoyo a Massa. Que cada uno de los Clubes del Fútbol Argentino se manifieste en defensa de sus Instituciones. NO A LAS SAD! No a la privatización del fútbol. Vamos Sergio querido, fuerza Compañero. Te necesita un País. MASSA PRESIDENTE».
Entonces, a las pocas horas, llegó una catarata de manifestaciones en contra de Milei y de las sociedades anónimas y, en algunos casos –los menos–, explícitamente a favor de Massa. Primero, el viernes ya cerca de la noche, fue un club de la Primera Nacional, Guillermo Brown de Puerto Madryn, y luego le siguieron el resto de los equipos del Ascenso. En todos los casos, legítimamente de acuerdo en que una presidencia de Milei significaría el indeseado desembarco de las SAD, aunque algunos dirigentes también prefirieron seguir la línea bajada por una AFA que suele tener injerencia para retocar los reglamentos cuando se trata de evitar descensos y aumentar ascensos.
Este sábado la proclama pasó a los equipos de Primera División. En verdad, primero escribieron algunos de sus presidentes, como Cristian Malaspina, de Argentinos Juniors -«No a las SAD en nuestros clubes. Solo recuerden la presencia que tuvieron nuestros clubes ayudando a nuestra sociedad en la pandemia. Un chico en un club es un chico menos en la calle»-, y Gonzalo Belloso, de Central -abiertamente a favor de Massa-.
Pero luego, ya desde el sábado al mediodía, comenzaron a tuitear las cuentas oficiales de los clubes. El primero fue Colón, que pelea el descenso, y de inmediato se sumaron el resto de los participantes de la Copa de la Liga, a excepción de Talleres de Córdoba, distanciado de la AFA. Tal vez no todos estaban de acuerdo con la coyuntura pero ninguno quiso quedarse afuera de la comunidad del fútbol.
De los clubes grandes, el efecto dominó comenzó con San Lorenzo, siguió por Racing, llegó a Independiente –incluso a pesar de que parte de su dirigencia, perteneciente a Juntos por el Cambio, adelantó que votará a Milei–, continuó por Boca y finalizó en River. El último, ya a mediados de la tarde del sábado, fue Estudiantes, el 99 de la lista. Sólo habían pasado 72 horas desde que había comenzado a viralizarse un video de Milei de hace un año.