Que el banco de suplentes en el que suelen sentarse los entrenadores durante los partidos era una suerte de silla eléctrica fue uno de los lugares comunes más repetidos en el fútbol argentino durante décadas. El largo parate por la crisis sanitaria, la reanudación del torneo sin público en los estadios y la temporada sin descensos invitaban a pensar que esa costumbre ya había pasado de moda. Pero no.
En las primeras seis fechas del campeonato ya hay tres entrenadores que dejaron su cargo: Juan Antonio Pizzi, en Racing; Miguel Ángel Russo, en Boca; y Sergio Rondina, en Arsenal. Un promedio de un técnico saliente cada dos fechas, cuando aún no se jugó un cuarto del campeonato y todavía faltan 19 fechas.
El primero que dejó su cargo fue Pizzi, en la Academia, la semana pasada. Empujado por los dirigentes, dejó un puesto en el que siempre estuvo en duda tras la caída por 1 a 0 en el clásico ante Independiente. Duró siete meses en el banco, más que en su anterior ciclo en San Lorenzo, en el que sólo estuvo siete partidos. El DT se fue con críticas a la dirigencia por la falta de diálogo y también fue duro con la falta de estructura que encontró en el club. Los dirigentes decidieron que su puesto quede ocupado por Claudio Úbeda, que trabajaba en las inferiores de Racing, y quedará a prueba hasta diciembre.
Luego llegó el turno de Miguel Ángel Russo, que en su segundo ciclo como entrenador xeneize consiguió dos vueltas olímpicas, en la Superliga 2019/20 y la Copa Maradona. Sin embargo, los 10 partidos sin triunfos erosionaron su imagen. Y no llegó a cumplir el contrato que terminaba en diciembre. En una situación similar a la de Úbeda en Racing, el Consejo de Fútbol que encabeza Juan Román Riquelme designó a Sebastián Battaglia, entrenador de la Reserva, ahora a cargo del primer equipo.
Rondina ya había superado los 100 partidos como entrenador de Arsenal, y hasta había conseguido el ascenso a Primera División en 2019. Pero este mal arranque y la última derrota ante Platense le costó el puesto. «No es fácil irse de casa. Es la realidad. Me voy tranquilo por todo lo que hicimos en estos tres años y medio y me voy con los objetivos cumplidos desde el primero al último», aseguró Rondina, que contaba con el respaldo de los dirigentes y los hinchas para seguir. Al día siguiente a su renuncia, Arsenal ya tenía nuevo técnico: Israel Damonte. Este sábado, a las 18, en Sarandí, tendrá su estreno ante el Racing de Úbeda.