En el fútbol argentino han cambiado los nombres que toman las decisiones pero el lema parece seguir siendo el mismo: todo pasa. El campeonato de Primera, cuyo inicio está previsto para el viernes próximo, con fixture sorteado, no comenzará el viernes que viene, como estaba estipulado. El torneo comenzará una semana más tarde, desde la 2ª fecha. El último partido del campeonato anterior se jugó el fin de semana entre el 18 y 20 de mayo. Casi cien días después, con un comité de regularización que parece no haber regularizado absolutamente nada, se produce algo inédito: un campeonato que arranca por la segunda fecha. La primera se jugaré en febrero próximo.
El cambio es por un pedido de los principales canales de televisión abierta, que aducen dificultades para programar los partidos de la fecha durante el fin de semana siguiente. El gerente general de la AFA, Víctor Taboada, gerente de la empresa TSU cosméticos y hombre de confianza de Armando Pérez, confirmó que tanto «Telefé, El Trece y Canal 9 han solicitado que el fútbol empiece el 26 de agosto por problemas de pantalla». Ese pedido fue trasladado a los clubes, quienes contestaron que no había problemas con la postergación pero hicieron el pedido de que arrancara por la segunda fecha, para mantener las localías en los fines de semana que habían sido asignados al sorteo del fixture, así podían cumplir con los compromisos pactados.
En tanto, ayer se sorteó el fixture de la B Nacional sin que haya un solo dirigente. El ascenso sigue en pie de guerra con el Comité de Regularización y con el gobierno de Mauricio Macri, a quien acusan de haber mandado a funcionarios a hacer promesas que luego no fueron cumplidas. Por eso, los clubes tienen decidido que no comiencen a la B Nacional, la B Metropolitana, la C y la D. Esta semana el Federal A anunció que también se sumará al reclamo.