La abanderada de los humildes, la actriz, la provinciana, la santa: de las muchas caras que anidan en Evita, el fotógrafo Alberto “el gordo” Haylli retrató, como nadie, la más secreta. Ser un cronista extraordinario tal vez sea precisamente eso: ver un resquicio ahí donde el otro creyó poner una máscara, un refugio frente a lo público. Por eso mirar a Evita a través de la lente de Haylli hace que todo cobre relieve de acontecimiento. Es la revelación de lo que hasta entonces parecía inaccesible, como si estuviéramos observando a una mujer extraña, sin la armadura protocolar de la política.
Cordobés de nacimiento, Alberto Haylli se mudó a los 8 años, en 1919, a Junín junto a su familia. Allí estableció vínculo con la familia Duarte, fundamentcáalmente a través de Juan, el hermano de Evita. Desde un lugar preferencial y con una sensibilidad notable para la fotografía, tuvo acceso a la intimidad familiar de Eva. Sin ir más lejos, a mediados de 1945 retrató el casamiento de Erminda Duarte. Ese mismo año, el 22 de octubre, Perón y Eva se casaron en la escribanía de Héctor Antonio Riales, en Junín. Más de 45 años después, Haylli contó a una revista local que realizó las fotografías del festejo: “Al día siguiente que se casaron, Elisa Duarte me llamó y me dijo que tenía que estar al mediodía en el hotel La Paz, frente a la basílica de Luján. Fui y allí estaban Perón y Eva, junto a unas treinta personas, festejando el casamiento por civil del día anterior. Hice las fotos que me pidieron y seguí en contacto con ellos pero no porque fuera peronista, porque todos sabían que yo pertenecía al glorioso y fraudulento partido conservador. Pero ni Perón -que manejaba todo- ni Eva me apartaron nunca por mi filiación política. Los vi y fotografié muchas veces, porque ellos siempre volvían a Junín. Me acuerdo que pasaban en el tren, rumbo a Mendoza, San Juan o San Luis, y miles de personas se agolpaban en la estación para verlos saludar por la ventanilla”. Si bien las fotos del casamiento nunca se encontraron, esta pequeña anécdota muestra la cercanía que Haylli tenía con la pareja, llegando hasta a retratar a Evita, ya frágil y enferma, en su último paso por Junín de camino a San Juan.
Estas y otras imágenes pueden verse en la exposición «Una memoria revelada», en la galería ArtexArte (Lavalleja 1062, caba), que tendrá lugar hasta el 13 de agosto de este año. Con una colección que comienza en la década de los ’30 y concluye en 1989, la exhibición invita a descubrir la obra del fotoperiodista, cineasta y archivista que nació accidentalmente en Córdoba, pero se transformó en una figura protagónica de Junín, con omnipresencia en todas las áreas sociales de la ciudad. Más de 95 mil negativos y 120 latas de películas dan cuenta de que, si bien sus fotografías del fenómeno peronista resultan ineludibles -hay más de 9 mil piezas que lo certifican-, la obra de Haylli las desborda. Su legado incluye imágenes de sucesos políticos, policiales, deportivos y culturales tanto de Junín como del país. Desde Ramón Castillo hasta Carlos Menem, retrató a todos los presidentes argentinos que le permitieron sus más de 60 años de oficio. Como fotógrafo de la policía, cuentan periodistas y amigos del diario La Verdad, registró el cadáver del General Pedro Eugenio Aramburu en 1970, asesinado por el Movimiento Peronista Montonero en Timote, ciudad ubicada a 158 kilómetros de Junín. Y aunque aún no se han encontrado las fotos del cadáver ni las de esa jornada, la anécdota dice algo de este fotógrafo extraordinario: quería contarlo todo, sin reticencias. En ese sentido, su lente no sólo registró sucesos políticos de gran importancia, la colección también contiene, por ejemplo, desnudos artísticos desde el año 1938 hasta la década de los ‘80. “Cuando empezamos a digitalizar el material fue como sacar pañuelos de una galera porque no se terminaba más. Lo más importante de la colección fue que permitió tener acceso a un material que sólo estaba ahí. Nosotros no recuperamos fotos, recuperamos historia, una identidad que estaba guardada, por eso todos nuestros proyectos se llaman ‘una memoria revelada’ (NdR: además de la exhibición, hay un libro y una serie documental de Encuentro con el mismo título, que relatan en detalle la relación de Haylli con el peronismo y el radicalismo, entre muchas otras cosas), porque lo que hicimos al recuperar este materia fue recuperar una memoria”, cuenta Christian Rémoli, curador de la exposición y director del Proyecto Haylli, en diálogo con Tiempo Argentino.
En el año 2006, Rémoli trabajaba en un documental sobre el Club Atlético Sarmiento, el equipo de Junín que en la actualidad compite en la primera división, cuando se encontró con el archivo de Haylli por intermedio de Herminia, la hija mayor. “Buscando material llegué a la terraza de un estudio de abogados y escribanos. En el altillo había una cantidad inmensa de latas y cajones. Era una pieza pequeña pero repleta de material fílmico. No sabíamos exactamente qué había, el archivo no estaba clasificado. Suponíamos que estábamos ante un acervo importante, pero nunca imaginamos su dimensión: 95 mil negativos de fotografías, 120 latas de películas en 16 mm y 500 diapositivas. Desde ese momento empecé a golpear puertas para poner en valor todo ese material y difundirlo. Pasaron diez años hasta que la exdiputada Rocío Giaccone, al enterarse del proyecto, nos ayudó a dar los pasos iniciales en la recuperación del archivo”, explica Rémoli a Tiempo. Para finalizar, consultado por este diario acerca de la importancia de la exposición, el curador destaca: “es la primera muestra que expone la variedad de un fotógrafo que, por belleza, por cantidad y diversidad, contó el siglo pasado como no lo contó nadie. Esto viene a poner un granito de arena para completar los huecos de archivo que tiene la historia argentina”.
La exposición tiene lugar en ArtexArte (Lavalleja 1062, caba), hasta el 13 de agosto, todos los martes y viernes de 14 a 20 horas, y los sábados de 14 a 19 horas.
En @proyectohaylli, tanto en Twitter como en Instagram, pueden observarse algunas fotografías y todas las novedades del proyecto.
Marcelo
7 July 2022 - 19:20
Buenisima la nota, es muy grato recorrer la historia de Junin y del pais en sus fotos.